El vino de la amistad y la cooperación sino-chilena
<P>El fortalecimiento de la cooperación entre ambos países no sólo favorece al desarrollo económico, sino también al mejoramiento del bienestar del pueblo.</P>
Chile se denomina el país ubicado en los confines del mundo, mientras que Santiago y Beijing son las dos capitales más distantes entre sí en este planeta. Sin embargo, nuestros dos países siempre han sido grandes amigos y socios estrechamente unidos, tal como describe un antiguo verso chino que refleja fielmente las vinculaciones binacionales: La íntima amistad borra la lejanía.
Nunca olvidaremos que hace 45 años, Chile fue el primero, a nivel sudamericano, en establecer relaciones diplomáticas con la Nueva China, y más tarde, en el ámbito latinoamericano, también fue el primero en apoyar el ingreso de China a la OMC, en reconocer el Estatus Pleno de Economía de Mercado de China y en firmar un TLC con nuestro país.
Chile es conocido como el reino del cobre, además de contar con ricas reservas de oro, mientras que China es la tierra del jade. Las medallas de los Juegos Olímpicos Beijing 2008 fueron hechas con jade chino y oro y cobre chilenos. A los chinos nos encanta emplear el término de matrimonio de oro y jade, para felicitar a una pareja en el sentido de una unión perfecta y divina. Por lo tanto, las medallas mencionadas no sólo simbolizan el honor supremo conferido a los atletas, sino que también testimonian la amistad y la cooperación entre China y Chile.
Constato con satisfacción que en el 2014, el volumen comercial sino-chileno ascendió a los 34 mil millones de dólares, hecho que llega a posicionar a China como el primer socio comercial de Chile y a éste como el tercer socio comercial de China en América Latina y el Caribe.
Los frutos de la cooperación sino-chilena han cubierto todos los aspectos de la vida de ambos pueblos. La cereza, el arándano y el salmón chilenos se han servido en las mesas de millones de familias chinas. Se dice que los autos BYD y otras marcas chinas llegan a ocupar el segundo lugar en el mercado chileno. En la Granja Piloto China-Chile, ubicada al pie de la Gran Muralla, los frutales chilenos se han cosechado en abundancia, testificando el éxito de la cooperación binacional. Ambas partes deben seguir esforzándose por crear condiciones para que más productos de buena calidad entren al mercado de la otra, en promoción de un desarrollo con mayor facilidad y más equilibrado del comercio bilateral.
Dadas las amplias perspectivas de la cooperación binacional industrial y en inversiones, albergo el deseo de explorar junto con el Gobierno y el sector empresarial de Chile el afianzamiento de la cooperación bilateral en áreas de infraestructura, procesamiento mineral y energías limpias, entre otras, así como el fomento de los proyectos de cooperación agrícola tales como el intercambio de idioplasmas, tecnología alimentaria y construcción de granjas piloto, haciendo de la inversión industrial un nuevo punto de crecimiento de la cooperación económico-comercial sino-chilena. Tomando en consideración el elevado nivel de desarrollo económico y alto grado de mercantilización de Chile, las prácticas chilenas en la cooperación entre los sectores público y privado, la supervisión del mercado y la seguridad social son algunos de los aspectos que merecen ser tomados como referencia por China. El fortalecimiento de la cooperación e intercambios entre ambos países no sólo favorece al desarrollo económico, sino también al mejoramiento del bienestar del pueblo.
Los intercambios culturales han asentado una sólida base popular para la ampliación de la cooperación binacional. Tan temprano como en 1952, en Chile se fundó la primera organización popular de amistad con China de América Latina-- el Instituto Chileno Chino de Cultura. Estoy a la expectativa de que ambas partes aprovechen la coyuntura de este Año de la Cultura China en Chile para promover a un creciente número de personalidades clarividentes de ambos países a dedicarse a la gran causa de la amistad sino-chilena para transmitirla de generación en generación.
Condición de buen amigo, condición de buen vino. El vino chileno goza de fama mundial y es también muy acogido en China. La amistad sino-chilena, sedimentada con el paso del tiempo, es como el vino, cuanto más añejo, más exquisito. Un buen vino requiere la perfecta combinación de tres factores, buen clima, tierra apropiada y un gran maestro vinícola. Mirando hacia el futuro, el desenvolvimiento de las relaciones sino-chilenas, al igual que producir un buen vino, conseguirá nuevos y mayores avances, dadas las condiciones favorables.
Primer Ministro del Consejo de Estado de la República Popular China.
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