Encuesta muestra leve mejora en indicadores de desigualdad, tras años de estancamiento
<P>Una baja "moderada", pero "estadísticamente significativa", fue la lectura del ministro de Desarrollo Social.</P> <P>Barraza aseguró que reformas del gobierno permitirán que la desigualdad baje "mucho más" cuando estén en régimen.</P>
"Nuestro país presenta altas y persistentes tasas de desigualdad de ingresos. Sin embargo, los datos de Casen 2015 muestran una disminución moderada y estadísticamente significativa de la desigualdad en la distribución del ingreso", fue la principal conclusión del ministro de Desarrollo Social, Marco Barraza, al observar las mejoras que arrojó la encuesta Casen 2015 respecto del coeficiente de Gini.
Dicho indicador, que muestra cuánto se aleja la distribución de los ingresos respecto de una situación de perfecta igualdad en un país -variando entre un 0 y 1- registró el año pasado un coeficiente de 0,495 para el ingreso generado por los hogares (autónomo), lo que fue catalogado como una baja relevante desde el 0,504 anotado en 2013. De hecho, la encuesta analiza que desde 2006 que no se observaban cambios relevantes en este punto. Además, se destacó que no había bajado de 0,5 desde entonces.
Por otra parte, al agregar los subsidios estatales dentro de la ecuación (ingreso monetario), la mejora es aún más significativa, pasando de un coeficiente de Gini de 0,491 en 2013, a uno de 0,482 en la última medición. En este sentido, el ministro Barraza remarcó que esto demuestra "la efectividad de las políticas públicas de transferencias en materia de subsidios por parte del Estado, lo cual es un buen indicador".
Con esto, el ministro de Desarrollo Social aprovechó de deslizar una crítica a la administración anterior, planteando que "en el período 2011-2013, cuando el precio del cobre era muy alto y había más ingresos para el país, la desigualdad se mantuvo inalterada". Consultado por la tendencia que podría darse a futuro, Barraza aseguró que "cuando las reformas propuestas por nuestro gobierno estén en pleno régimen, la desigualdad va a haber disminuido. Seguirá existiendo, pero disminuirá mucho más que lo que hemos logrado constatar en este período".
Distribución de ingresos
Volviendo a las cifras, cabe destacar que la mejora en el indicador de desigualdad se dio especialmente por variaciones en los segmentos de mayores ingresos, es decir, los deciles IX y X. En el primer caso, la distribución del ingreso autónomo per cápita del hogar pasó de un 16% del total de ingresos del país a 15,4% en 2015, mientras que en el decil X ese porcentaje cayó desde un 35,4% a un 34,4%.
Al contrario, en el segmento de la población de menores ingresos, el primer decil subió en la distribución en 0,1 punto porcentual, llegando a 1,3% del total de ingresos. En tanto, el decil II pasó de un 3,2% en 2013 a 3,4% el año pasado.
En este punto, es importante recordar que a fines de 2015 aún no se observaban aumentos en la tasa de desempleo, lo que recién se comenzó a concretar el segundo trimestre de 2016. A su vez, mirando la distribución del ingreso monetario (con subsidios) per cápita del hogar, se observa que el decil de mayores ingresos pasó de acaparar un 34,4% del ingreso a un 33,4%. En el caso del noveno decil, dicha distribución bajó en 0,6 p.p., aterrizando en un 15%. Los deciles I y II subieron 0,1 p.p. desde 2013, llegando a 2,1% y 3,8% del total, respectivamente.
Pese a estas mejoras, y tras desagregar algunas de las medidas de desigualdad por ingreso, el titular del Ministerio de Desarrollo Social afirmó que "la desigualdad tiene múltiples rostros. Hay una que es por ingresos y otra por segregación (...); tiene una expresión económica, pero también de convivencia social. Hay que saber enfrentarlo con políticas orientadas a la solidaridad".
Más allá del Gini
Otras medidas de distribución de ingresos que fueron destacadas en la encuesta tienen que ver con las comparaciones entre el 10% más rico y el 10% más pobre del país, donde también se vieron mejoras.
En el caso del ingreso autónomo, la brecha entre ambos segmentos bajó de 29,1% a 27,2% en el período 2013-2015. Para el ingreso que suma los subsidios (monetario), dicha brecha bajó de 17,1% a 16%. Asimismo, el índice que mide la diferencia entre el 20% de mayores y menores ingresos arrojó un retroceso de 11,5% a 10,7%. En el ingreso monetario, la diferencia cayó en 0,6 p.p. hasta un 8,2%.
Finalmente, mirando el índice 10/40 -que va tomando cada vez más relevancia a nivel mundial-, la encuesta Casen 2015 arrojó una leve mejora de 2,5% a 2,4% en el ingreso autónomo respecto de la última medición. En el caso del ingreso monetario, este índice cedió 0,2 p.p. hasta un 2,0%.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.