ETA anuncia alto el fuego "permanente" en medio de desconfianza general

Cuatro meses después de declarar un cese de sus "acciones armadas ofensivas" y con un historial de más de 42 años de lucha y cerca de 850 muertos, ETA anunció ayer un alto el fuego "permanente y de carácter general", que por primera vez podrá ser "verificado por la comunidad internacional". Sin embargo, el gobierno español y la mayoría de las fuerzas políticas desestimaron esta nueva tregua, ya que la consideran insuficiente, al no implicar el fin definitivo e irreversible de la violencia del grupo armado.

En un comunicado grabado en video, en el que aparecen tres encapuchados y que fue difundido por el diario vasco Gara, el grupo extremista expresa su compromiso "con un proceso de solución definitivo y con el final de la confrontación armada".

Con ello, según la agencia DPA, ETA recoge parte de la demanda de la izquierda independentista, pero se queda corta en cuanto a la expectativa de que ella, unilateralmente, anuncie que abandona la violencia, ya que se limita a utilizar la expresión "confrontación", lo que en su jerga incluye a los cuerpos de seguridad en España y Francia, a los que considera "fuerzas opresoras". Además, no renuncia a exigir una negociación sobre el derecho de autodeterminación y la independencia del País Vasco con el gobierno español.

Por ello, no es de extrañar que el Ejecutivo español rechazara como insuficiente el anuncio etarra. El jefe de gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, dijo que "el comunicado no sirve" y que "no se bajará la guardia". Aseguró que su Ejecutivo no aceptará "ninguna condición" de ETA, cuyo anuncio consideró "insuficiente", porque "sólo vale el fin definitivo de la banda".

En tanto, el vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, reiteró que lo que se reclama a ETA es una declaración con la que ponga fin a la lucha armada "de manera irreversible y definitiva", lo cual, subrayó, no ha sucedido. "No es una mala noticia, pero no es la noticia del final de ETA", agregó. En el mismo sentido se pronunció el oficialista Partido Socialista Obrero Español (Psoe), el cual calificó el comunicado como "una noticia importante", pero que tiene que ser confirmada con "hechos y sin condiciones", "ya que nos han engañado muchas veces".

Desde 1981, ETA ha declarado 12 treguas. Incluso tras el cese del fuego "permanente" de marzo de 2006, el grupo llevó a cabo conversaciones con el gobierno socialista. Pero el diálogo no prosperó y ETA volvió a la vía violenta, con la explosión de una furgoneta en el Aeropuerto de Barajas, en diciembre de ese año, que causó la muerte de dos personas.

Desde la oposición, el pronunciamiento no fue muy distinto al del Psoe. Para María Dolores de Cospedal, "número dos" del Partido Popular (PP) , el comunicado de ayer supone sólo "una pausa, no una renuncia a la actividad criminal" de ETA, y advirtió que su formación no aceptará que se negocie con la banda.

Analistas calificaron el texto del grupo terrorista como "propaganda" y coincidieron en que no cumplía con demandas clave, como la disolución definitiva de la organización. También consideraron que el objetivo final de ETA es que su brazo político, el ilegalizado partido, Batasuna, se integre a la campaña de cara a las elecciones municipales de mayo.

"Es un acto más de propaganda de la organización terrorista (...) que recordemos está formada tanto por ETA como por Batasuna", dijo Rogelio Alonso, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Rey Juan Carlos I.

Portavoces de la antigua Batasuna dijeron que el anuncio de ETA es una "decisión sin precedentes" con un alcance "histórico".

El Sinn Fein, antiguo brazo político del ya inactivo Ejército Republicano Irlandés (IRA), pidió al gobierno español que aproveche la "oportunidad" que, a su juicio, representa la oferta de ETA.