Ex ministro de Hacienda estrena nuevo centro con debate tributario
<P>Agostini, Morandé y Guillermo Larraín analizaron la propuesta del gobierno.</P>
El ex ministro de Hacienda Felipe Larraín estrenó ayer el Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales (Clapes), y lo hizo con el tema del momento: la reforma tributaria.
En el panel de expositores estuvieron Claudio Agostini, académico de la U. Adolfo Ibáñez; Guillermo Larraín, economista de la Universidad de Chile, y el decano de la Facultad de Economía de la U. Mayor, Felipe Morandé. Antes de comenzar las exposiciones, Larraín dijo que el centro se dedicará a trabajar en el debate de las políticas sociales y económicas.
Agostini afirmó que lo óptimo para un sistema tributario es la "equidad horizontal con un impuesto al ingreso, es decir, personas con igual ingreso pagan lo mismo en impuestos, independientemente de las fuentes de sus ingresos".
Asimismo, dijo que la evidencia empírica muestra que los impuestos progresivos sí tienen la capacidad de redistribuir ingresos, y que cuando los países se cambian a impuestos menos progresivos, la distribución empeora. Además, señaló que las exenciones en el IVA, por ejemplo, son un mal instrumento redistributivo.
Morandé calificó de optimistas los supuestos que realizó el gobierno en el cálculo de los ingresos por menor evasión y elusión. "Por el solo hecho de la factura electrónica se recaudarán entre US$ 600 millones y US$ 700 millones extras", aseveró.
Mientras que Guillermo Larraín planteó que la reforma es necesaria para financiar la educación. "Chile tiene un problema serio de calidad de su educación. Se viene advirtiendo desde hace años y las reformas previas no han bastado", señaló. En cuanto al debate, argumentó que "es importante filtrar opiniones legítimas, pero que son de grupos de interés... Siempre ocurre que los pocos afectados tienen mayor capacidad de organización que los muchos beneficiados".
Larraín comentó, además, que la reforma tributaria sirve para financiar los cambios en educación y, "en el escenario base, ello debe mejorar la calidad de nuestros trabajadores y, por lo tanto, la productividad".
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