Federación de estudiantes
Señor director:
En una reciente carta, el señor Jorge Yacoman va más allá de lo escrito y me atribuye dichos que no he señalado. Puse la situación de Venezuela como ejemplo de casos en que un grupo reducido de dirigentes intenta arrogarse la voz de los estudiantes chilenos, por cuanto deja en evidencia la radicalización de sus posturas. Sin desconocer su carácter de representantes democráticos, algunos en sus declaraciones han justificado y defendido la violencia del Estado. Los dirigentes estudiantiles no podemos justificar la clara violación de los derechos de los jóvenes venezolanos, aunque nos hubiera elegido la más numerosa de las asambleas.
El pleno de la Confech representa a no más del 30% del total de los estudiantes universitarios y, prácticamente, de ninguna institución surgida luego de 1989. Ante la inexistencia de una institucionalidad y reglamentación clara, cabe la pregunta por su representatividad y pluralismo.
También escribí que a quienes pensamos distinto nos toca “no ceder ante ideas que histórica y filosóficamente se han mostrado fracasadas, y defender un ideario basado en la justicia, la libertad y la solidaridad”. Esto no es sólo una crítica a los que sostienen dichas posturas radicalizadas, sino una autocrítica a la pasividad de quienes compartimos estos ideales. Invitamos a abandonar la indiferencia y a trabajar por una educación de calidad, comprometiéndonos desde ya a ser un actor propositivo en la discusión de ideas.
Constanza Astorga M.
Presidenta Federación de
Estudiantes U. de los Andes
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.