González: El líder de un sueño nacional

España es el único país de Copa Davis que puede decir, y comprobar, que está capacitado para ganar en cualquier parte del mundo y superficie. Que lo diga Argentina, que en 2008 había armado una fiesta en cemento ante la ausencia de Rafael Nadal. Chile, al igual que muchos otros, echan su suerte al devenir de los sorteos y al estado de sus jugadores. Y esa dura realidad, al menos en esta parte del planeta, no se esconde, se reconoce.

Otra vez en cuartos

Chile, por tercera vez desde que se creara en 1981 el nuevo formato del torneo, avanza a unos cuartos de final (las otras fueron derrotas ante Australia, en 1982, y Estados Unidos, en 2006, todas ellas como visita).

La lucha por la "Ensaladera de Plata" de 1976, con una derrota por 4-1 ante Italia, escapa a ese análisis, toda vez que se disputaba de una forma muy distinta.

Y en esta ocasión, lo hace con renovados bríos, con Fernando González y Nicolás Massú en segunda oportunidad como bandera de batalla, con la creencia de que, quizás, no se repita esta oportunidad en muchos años.

Con el gemelo izquierdo dañado y sus ya típicos dolores en las rodillas, el "Bombardero" salió ayer con la tarea de acabar con Israel. Sólido: 6-4, 6-4 y 6-3 sobre Dudi Sela, el mismo que había sacado a Chile del Grupo Mundial en 2007.

El estandarte

Nadie dudó un instante de que no sería otro el que diera esa satisfacción en momentos en que el país se levanta tras un terremoto. Una "alegría insignificante", como el mismo jugador catalogó el triunfo, dejando en claro que los triunfos deportivos resultan nimios cuando se está en medio de una crisis social.

Por un momento, la gente olvidó el dolor ajeno. Disfrutaron de la victoria y proyectaron su suerte para julio de este año, cuando se enfrente a la temible República Checa, aunque con la salvedad de que por primera vez se hará en casa.

Y si bien se le pudo ganar a Israel sin Fernando González, tal como lo hicieran ante Austria en 2009, en esta ocasión el panorama se anunciaría desastroso sin su presencia. El equipo se basa desde hace rato ya en González, por más que Massú siga salvando las situaciones con toda su experiencia.

El "Bombardero" lo sabe. En esta oportunidad no deberá agarrar maletas con sus compañeros para ir a jugar al pasto ante Estados Unidos. Ahora será en casa. En Coquimbo, en un escenario de arcilla y con los sueños de grandeza de miles de chilenos.