Holly Petraeus se refugia en el mundo militar tras el escándalo de su esposo

A comienzos de los 70, William A. Knowlton era un reputado veterano de la Segunda Guerra Mundial y uno de los más condecorados generales de Estados Unidos. En el mundo militar, su prestigio era ampliamente reconocido. En aquel entonces Knowlton había asumido como superintendente de West Point, la academia militar más estricta del país. Y su hija, Holly, era una joven con la cual muchos aspirantes querían casarse. Sólo uno consiguió conquistarla: David Petraeus. Hoy, la pareja enfrenta el momento más delicado y difícil de sus 38 años de matrimonio, después de que se destapara un affaire extramarital que a Petraeus le costó la jefatura de la CIA, pero también parte de su prestigio personal al interior del Ejército.

Como muchas de las esposas de los generales, Holly ha debido enfrentar las dificultades y rigores del trabajo de su pareja. En casi cuatro décadas se ha cambiado 23 veces de casa, ha debido criar muchas veces sola a sus hijos Stephen y Anne, pero también ha apoyado a su marido en cada una de sus misiones. En sus últimos 10 años en el Ejército, Petraeus pasó siete en Irak y Afganistán. Pero por su historia familiar y su propio perfil, Holly no ha sido la típica esposa de general.

La mujer de Petraeus -que está más que furiosa con el affaire de su marido según ha comentado uno de sus cercanos-, trabaja en el Consumer Financial Protection Bureau y entre sus responsabilidades está ayudar, aconsejar y proteger a las familias militares con sus asuntos financieros. Ese trabajo lo obtuvo gracias a la recién electa senadora Elizabeth Warren, quien al presentar a su amiga, señaló: "Si alguien entiende los problemas y cargas de las familias militares... esa es Holly Petraeus".

Según el diario USA Today, la esposa de Petraeus ha dejado su propia huella en el mundo militar. En ese sentido, ha estado presente en cada ceremonia de retorno de los subalternos de su marido, en horas de la madrugada, en tardes de lluvia y pese a su carga de trabajo.

Las esposas de otros generales y oficiales han cerrado filas en torno a Holly y ninguna de ellas ha querido comentar el escándalo, que ha provocado un profundo impacto en el Ejército.

Cita a ciegas

No sólo el padre de Holly luchó por su país; también lo hizo su hermano, su abuelo, su bisabuelo y su tatarabuelo, desde la Guerra Civil en adelante. Holly estudió en el prestigioso Dickinson College en Pennsylvania.

La primera cita con Petraeus fue a ciegas y ocurrió en medio de un partido de fútbol americano. Un par de meses después se comprometieron y casaron, en 1974. En varias ocasiones y mucho antes de que estallara el escándalo, la propia Holly ha debido salir al paso de versiones en el sentido de que Petraeus la escogió para ascender en su carrera.

"Nos casamos enamorados", contó Holly en una biografía sobre su esposo (Tell Me How It Ends), publicada antes del libro escrito por Paula Broadwell, la biógrafa que se transformó en la amante de Petraeus. "Ella ha sido la mujer que todo soldado quiere tener", dijo alguna vez Petraeus.