Homeland retoma tono íntimo en tercer ciclo luego de críticas

La culpa puede ser de las expectativas. Después de una primera temporada redonda, gracias a la cual Homeland se coronó como mejor serie de drama en los premios Emmy del año pasado - rompiendo la racha de cuatro triunfos consecutivos de Mad men-, el espacio estrenó su segundo ciclo frente a una audiencia que había enganchado con el desarrollo de los personajes más que la conspiración política y acción en las que se enmarcaba la historia, que terminaron por dominar la temporada. Las sospechas recayeron sobre Howard Gordon y Alex Gansa, creadores de la serie, que también ejercieron el rol de productores ejecutivos en 24, espacio marcado por un ritmo acelerado.

"Creo que se hizo un muy buen trabajo manteniendo el grado de adrenalina que un programa que es un thriller debe tener, lo que es muy difícil de lograr. Pero no puedes complacer a todo el mundo. Esta temporada la acción va a disminuir un poco y la trama se concentrará en lo que ocurre con los personajes. En ese sentido regresa un poco a lo que fue el primer ciclo, porque es más sobre la emocionalidad de los personajes y menos sobre los raptos o la misión puntual que está ocurriendo", explica a La Tercera Morena Baccarin, quien interpreta a Jessica Brody en el programa. La actriz, que obtuvo una nominación al Emmy por su rol, asegura estar "muy orgullosa" del trabajo realizado en la segunda temporada.

El tercer ciclo, que se estrena hoy, a las 22 horas por FX (señal 50 VTR y 607 Movistar), retoma la historia dos meses después del atentado a la sede de la CIA que realizó el grupo Al Qaeda, responsabilizando a Nicholas Brody (Damien Lewis), quien se transformó en un fugitivo, por lo que no aparecerá en los primeros episodios. Tras la explosión, el Congreso está realizando una investigación para descubrir a los responsables del atentado, poniendo en tensión el vínculo entre Carrie Mathison (Claire Danes) y su mentor, Saul (Mandy Patinkin), quien ahora es el director de la CIA. Su misión es eliminar a los principales líderes de Al Qaeda que estuvieron involucrados, junto con encontrar a Brody.

"Es una temporada diferente, porque todos tienen mucha angustia y son tantas las cosas que pasaron en el ciclo anterior, que cada personaje está tratando de lidiar con eso de alguna manera. Es muy intensa y creo que Homeland tiene la cualidad de dejarte sin aliento cuando la ves. Pero ahora son más los aspectos emotivos los que están trabajándose, a diferencia de la temporada anterior", agrega Baccarin.

La familia

Con Brody como uno de los terroristas más buscados del planeta, el nuevo escenario tendrá a su familia tratando de acostumbrarse al radical cambio de situación, que implica perder el apoyo económico del gobierno. Además, deben lidiar con el intento de suicidio de Dana (Morgan Saylor), la hija mayor. Se trata un personaje clave en el intento de Carrie por dar con el paradero de Brody y aclarar el incidente de la CIA, pues considera que es inocente. "Ella se involucra con la familia porque está tratando de limpiar la reputación de Brody e intenta mantenerse en contacto, pues cree que si logra saber lo que pretende hacer Dana puede conseguir contactar a Brody, pues ella es la única persona con la que siempre tuvo una conexión especial. Si bien Brody reaparece en algún momento, él y Jessica no van a estar juntos", adelanta Baccarin. La actriz también comenta que la relación entre madre e hija tendrá un profundo giro hacia el final de la temporada: "Creo que es para mejor, pero es un proceso muy doloroso".

En su regreso, la serie ha obtenido buenas críticas en Estados Unidos, aunque todavía no se sabe cómo inferirá la reaparición de Brody en la misma, ya que parte de la prensa especializada considera que es un personaje que debe morir, como apuntó Entertainment Weekly. Pero la ausencia de Brody funcionará como enlace entre los personajes de Danes y Baccarin. "Jessica está tratando de seguir adelante. Está en una situación que le cuesta aceptar. Y desarrolla una relación, que yo no definiría como amistad, con Carrie porque ella es la única persona que realmente entiende por lo que ella está pasando", explica la actriz.