Jennifer Lopez encendió el Movistar Arena en su enérgico debut como solista en Chile

No fue necesario que apareciera Jennifer Lopez, ni siquiera que se iniciara el video que servía de introducción al show. Bastó con que las luces del Movistar Arena se apagaran para que anoche las sillas que llenaban la cancha del recinto pasaran a ser poco más que un adorno o un banquillo usado para poder estar más alto.

A las 21.17 horas de ayer, ocho bailarines ataviados con bastones, suspensores y sombreros de copa dieron inicio a la parada local del Dance Again Tour, la primera gira mundial de la estadounidense y también la primera que la trajo a Chile como solista, ya que en 2009 había acompañado a Marc Anthony -entonces su marido- en un show. Segundos después de la aparición de los bailarines, la cantante de 42 años hizo su entrada, vestida con un ajustado y brillante traje, y cantando Get right para dar inicio a un show que se extendió por 100 minutos, centrado en éxitos como Love don't cost a thing, la segunda canción que despachó entre fuegos artificiales.

"¿Cómo están, Chile? ¿Se sienten bien?", fueron las primeras palabras que dirigió a las 10 mil personas que llenaban el lugar. Durante todo el show, la cantante se esmeró en hablar en español, aunque a ratos no se entendían sus intervenciones, en las que se mezclaban también algunas palabras en inglés y constantes risas.

El recital estuvo lleno de baile, cambios de vestuario y también efectos, que no se quedaron sólo en los fuegos artificiales: también hubo fuego, humo y viento, que se veían magnificados en la pantalla que llenaba el fondo del escenario, por detrás de los músicos y coristas que se repartían en los tres niveles de la tarima.

Jenny from the block, If you have my love y Let's get loud fueron algunas de las canciones entregadas por la cantante, quien luego sigue su gira por Argentina y Brasil, donde se mostrará un concierto igual al de Santiago, excepto por un detalle: en una de las pausas del show -que la cantante usaba para cambiarse de ropa- apareció Pablo Peña, un guitarrista local que participó en Q'Viva: the chosen, reality show conducido y producido por la cantante y Marc Anthony. Hasta la tarde se había considerado que Peña acompañara a Lopez en una versión de Gracias a la vida, que ya habían hecho en el show en Las Vegas que marcó el fin del reality, pero finalmente no se agregó la canción porque "no estaba la pista de acompañamiento", explicó el propio Peña después del show.

Los bailarines Power Peralta, que participaron del mismo programa, vieron el show desde la tribuna, mientras que hasta la primera fila de la cancha llegaron New Kids on the Block, que esta noche se presentan en el mismo recinto. Acompañados por gente de su equipo, los chicos de Boston se instalaron entre el público, logrando pasar inadvertidos. Salieron 20 minutos antes del fin del espectáculo.