Kim Schmitz: La vida de rico y famoso del creador de Megaupload
<P>Costosas fiestas, autos de lujo y hasta una recompensa por el arresto de Bin Laden figuran en su historial. </P>
Los primeros pasos en el mundo de la tecnología de Kim Schmitz, fundador de Megaupload, no entregaban ningún atisbo del futuro perfil de enemigo número uno de sellos musicales y grandes estudios de Hollywood. Nacido en Alemania en 1974, Schmitz ingresó al mundo empresarial en 1994, cuando fundó DataProtect, una empresa especializada en seguridad informática.
Cinco años después inventaría un sistema que les permitiría a los autos Mercedes-Benz incorporar banda ancha y acceso a internet para los pasajeros. Pero no fue hasta que creó Megaupload, en marzo de 2005, que su vida adoptó un estilo de rico y famoso. Según reveló el FBI, el negocio de alojar todo tipo de contenidos, cobrar por descargas más veloces, incluir publicidad y hacer vista gorda al tráfico de películas y discos era bastante lucrativo: al momento de ser detenido, Schmitz ganaba US$ 115.000 al día, mientras que 64 cuentas bancarias almacenaban cerca de US$ 175 millones.
Este dinero le permitía a Schmitz, también apodado "Kim Dotcom", realizar toda serie de excentricidades, como ofrecer una recompensa de US$ 10 millones por información que llevara al arresto de Osama Bin Laden. Todo esto lo hacía desde la comodidad de su casa, de US$ 30 millones, ubicada en Nueva Zelandia -donde fue arrestado- y que incluso tenía un gran cartel en la entrada que anunciaba "Mansión Dotcom".
En su interior, la casa -una de las más caras del país oceánico- tenía la última tecnología en cerraduras y sistemas de seguridad. Pero eso no es todo, porque en sus enormes garajes tenía 18 autos de lujo, incluyendo un Cadillac rosado, un Rolls-Royce Phantom Drop Head Coupe con una patente que decía "Dios", dos Mercedes-Benz CLK DTM con patentes que decían "Bueno" y "Maligno" y un Mercedes-Benz CL63 AMG con la patente "Hacker".
Schmitz también solía correr autos en el rally Gumball 3000 Rally, un evento que se realiza cada año en rutas públicas. En una de ellas, Schmitz fue filmado sobrepasando descaradamente y a toda velocidad a un auto policial. Además, solía filmar sus constantes viajes a Mónaco junto a modelos y sus festines con amigos.
Su afán de celebrar no tenía límites y en 2011 le regaló a la ciudad de Auckland una fiesta de fuegos artificiales de Año Nuevo que le costó US$ 500 mil. Todo para conmemorar la entrega de su residencia por parte de Nueva Zelandia. El show lo observó desde un helicóptero junto a su esposa, Mona, quien en abril dará a luz gemelos.
Por si fuera poco, Schmitz era el número uno del ranking mundial de jugadores multiplayer del título bélico Modern Warfare 3, bajo el apodo de Megaracer.
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