La brasileña que eligió el boxeo para bajar de peso

A comienzos de esta década, la boxeadora Adriana Araujo quería convertirse en estrella del fútbol femenino, pero sus anhelos se vieron truncados. Ayer, la brasileña venció a la marroquí Mahjouba Oubtil y se convirtió en la primera púgil latinoamericana en asegurar una medalla olímpica en boxeo.

Aún puede aspirar a más, pues su consagración definitiva podría producirse si supera en la semifinal a la subcampeona mundial, la rusa Sofía Ochigava, quien ya la doblegó por 15-6 en el último Mundial.

Su motivación para cambiar de deporte fue muy particular. "Lo mío era el fútbol, pero un día practiqué pugilismo para bajar de peso. Y aquí sigo", declaró tras su actuación.

La historia de esfuerzo de la púgil sudamericana continuó en Londres. Pese a que el deporte de los puños comenzó a disputarse el 28 de julio, las damas partieron recién el domingo. Ayer, disputaron sus segundas peleas. "Eso me afectó. Tuve que bajar de peso y pelear con cansancio. Pero llevaba 12 años en espera de pelear en unos Juegos Olímpicos y ahora estoy feliz con la medalla. Aunque voy por más", sentenció la brasileña.

Araujo, quien luce tatuajes en gran parte de su cuerpo, es la única latina que sigue en competencia (la venezolana Karlha Magliocco cayó por 26-16 ante la estadounidense Marlen Esparza). Su apariencia impone respeto, pero bajo el cuadrilátero se muestra afable y dispuesta. También, optimista. "Es un honor esto, pero voy por más. No es imposible ganar el oro", concluyó la oriunda de Bahía.