Los detalles de la primera terapia con células madre en paciente con daño cerebral
<P>Paciente que sufrió parálisis tras ataque, recibió inyección en el cerebro con 2 millones de células madre. </P>
Un coágulo en su cerebro le provocó un ataque isquémico hace 16 meses y paralizó todo el lado derecho de su cuerpo. Desde entonces no puede caminar, moverse o hablar con naturalidad. Con las terapias actuales y cerca de 60 años sus posibilidades de recuperación eran escasas.
Por eso, un grupo de científicos de la U. de Glasgow, en Inglaterra, lo escogió para un tratamiento pionero en el mundo: le inyectaron directamente en la zona lesionada de su cerebro dos millones de células madre embrionarias con el fin de regenerar al menos parte de las neuronas dañadas. Un resultado que obtuvieron, con éxito, en pruebas en ratones. "Inyectamos las células con una aguja muy delgada cerca de la parte del cerebro donde se había producido el daño del ataque cerebral. La operación no duró más de una hora. Se trata de un paciente que quedó con una severa discapacidad luego del ataque. No podía mover el lado derecho de su cuerpo, tenía muy poco movimiento en su brazo y en su pierna. Desde que tuvo el ataque, no ha podido caminar, por lo que es muy dependiente de otras personas", explica a La Tercera Keith Muir, investigador principal y encargado del procedimiento realizado en el Southern General Hospital, Inglaterra.
Tras la operación, el paciente fue dado de alta y los científicos esperan que en meses puedan verse los primeros resultados. Michael Hunt, gerente general del laboratorio ReNeuron, que suministró los dos millones de células madre para el procedimiento, explica a este diario que el fin de esta terapia es minimizar los daños ocasionados por los ataques cerebrales. "En las pruebas que hicimos antes en roedores, que fueron muchas, estos lograron recuperar total o parcialmente su movilidad", dice Hunt. Y agrega que aunque desconocen qué pasará con las células madre en el cerebro del paciente, en animales lograron regenerar algunas neuronas, que otras que estaban inactivas volvieron a estimularse y que se crearan nuevos vasos sanguíneos. "Todo esto provoca una reactivación de las funciones de la zona del cerebro que quedó dañada", dice.
Los científicos no saben si se necesitarán nuevas inyecciones para este paciente, ya que en la primera prueba administraron la menor dosis. "Inyectamos dos millones de estas células que no sabemos si serán suficientes. No sabemos cuántas de estas células podrían necesitarse para tener un efecto y parte del tratamiento que estamos haciendo pretende saber qué tan grandes deben y pueden ser las cantidades que necesitan los pacientes para seguir adelante y recuperarse. Ahora debemos seguir al paciente muy de cerca por dos años, hacerle sesiones clínicas de escáneres y exámenes de sangre para saber y estar en cada momento seguros de que no hay efectos colaterales por las inyecciones", dice Muir.
El experto señala que 12 nuevos pacientes con daño cerebral recibirán esta terapia en 2011, por lo que esperan tener resultados de la investigación global en dos años, cuando tengan los datos del tratamiento en los 13 pacientes.
Este no es el primer tratamiento en humanos con células madre embrionarias que se realiza en el mundo, aunque sí en este problema médico. En octubre pasado científicos de EE.UU. anunciaron el uso de este tipo de células para tratar a pacientes con daño en su médula espinal. El tratamiento que tuvo a su primer paciente el mes pasado, planea enrolar a otros nueve. Asimismo, antes de ayer, la firma estadounidense Stean Cells Inc., anunció sus planes para llevar a cabo un ensayo con células madre neuronales para lesiones en la médula espinal, en Suiza. Todos procedimientos que generan un fuerte debate ético debido a la manipulación de embriones que esta técnica supone. En el caso de los expertos de Glasgow la crítica es mayor, ya que no se obtienen células madres desde blastocitos (embriones a los siete días de fertilización), sino de fetos de 12 semanas provenientes de embarazos fallidos que son guardados por laboratorios.
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