Modelos chilenas se reinventan creando sus propias empresas
<P>De Pilar Jarpa con un centro de cosmética médica a Adriana Aguayo con un spa, figuras destacadas de las pasarelas chilenas invierten en iniciativas comerciales que las tienen desarrollando nuevas facetas.</P>
Cremas y tratamientos con Pilar Jarpa
"Esta máquina vale lo que un departamento", cuenta Pilar Jarpa, la rubia que con 8 meses de embarazo tiene la piel igual que cuando se toma fotos con esos trajes de Rubén Campos con escotes, tajos y brillos y plumas y que ahora está rodeada de cremas. Cremas para todo. Para las arrugas. Para la celulitis. Las manchas. La piel seca. La grasa. La estresada. Porque la figura de las pasarelas se reunió con tres socios más, arrendó un local en Avenida La Dehesa 2035 y se instalaron en un espacio blanco, pulcro e higiénico con la línea de cosmética médica Mesoestetic. Y allí Jarpa está de nueve de la mañana a tres de la tarde. Recibiendo a clientas como su amiga la uruguaya Claudia Schmitd, la misma de Morandé con Compañía; animadoras de televisión y mujeres que no quieren cirugía estética, sino que los tratamientos con las cremas, elixires, concentrados y con las máquinas que Jarpa dice que cuestan tanto como un departamento de un ambiente. Atienden dos esteticistas integrales asesoradas por un cirujano plástico. La maniquí que llega con sus tacos de Gotta afirma que "esta es mi inversión, es el dinero de tu trabajo que lo pones en esto, un proyecto en el que creo firmemente".
Y con tono de empresaria comenta que "la cosmética médica es lo que se impone en el mundo, con tratamientos para los problemas del rostro y el cuerpo que son mínimamente invasivos. Sin cirugías. Con resultados inmediatos".
"Titi" Aguayo y las máquinas de Madonna
Con un jeans Diesel imposible de ceñido, la modelo y ex polola de Marcelo Salas, Adriana "Titi" Aguayo, dice "mira... pura fibra". Se levanta una polerita verde , muestra la cintura y es cierto. Porque una de las modelos más conocidas también está convertida en una experta en acondicionamiento físico y ya tiene a 150 socias en su spa de fachada verde en Avenida Kennedy 8292, por donde circulan desde actrices de televisión como Catalina Pulido y Javiera Acevedo, hasta una lista de maniquís igual de flacas que la dueña de Seven. "Le pusimos Seven porque es como 'se ven' bien, 'se ven' tonificadas, 'se ven' bronceadas, y porque un siete es la máxima nota en Chile", explica la figura del pasado desfile Cachantún Fashion que se gastó "todos los ahorros" en este centro en Vitacura donde la novedad son las máquinas "fitvibe", "las mismas que usa Madonna", dice ella. La anfitriona asegura que sólo es necesario ponerse arriba y afirmarse para que las vibraciones del aparato comiencen a endurecer el cuerpo del cliente. Tal como lo tiene Aguayo.
La agencia de Paz Bañados y Casciano
La novia de Nicolás Massú con taco alto y ropa interior de encaje desfilando por entre fotógrafos e invitados bebiendo champaña fue la última producción que realizaron las modelos María Paz Bañados y Clarissa Casciano. Juntas fundaron la agencia de comunicaciones Magnolia, que ya tiene de clientes a un nuevo hotel boutique, una tienda de diseño de la muy chic avenida Alonso de Córdova y la marca de lencería que invitó al evento de hace unos días. "Nuestra fórmula es cumplir lo que prometes. Tratar de mantener lo que le propones al cliente", cuenta Bañados, que conoció el mundo del glamour y las relaciones públicas durante su estada en Estados Unidos, trabajando para una agencia que la tuvo sentada entre Tom Hanks y Renee Zellwegger en una reunión de Gucci.
En 2006 regresó a Santiago. Puso una agencia de modelos, Add Me, y hace tres meses con Casciano, un de las más elegantes de las pasarelas, fundaron esta nueva iniciativa que las tiene instaladas en Providencia. Trabajando con estilo.
Carola Jorquera analiza y asesora
Su papá decía que los hombres tenían que estudiar y las mujeres casarse. Pero Carola Jorquera nunca hizo caso. Se rebeló. Estudio Periodismo. Y cuando llegó al taller de un diseñador para hacerse un vestido, él la vio y le dijo que estaba aburrido de tanta rubia y la envió a las pasarelas. Nunca más paró y ahora la modelo y panelista de Buenos días a todos se ríe contando la historia desde su escritorio de vidrio y frente al computador personal en su oficina de la agencia de asesoría comunicacional Inter-medios.
Desde los cuarteles de la empresa de Jorquera y sus socias, todas amigas, en Las Condes, comenta que entró hace seis meses y que "la idea es tomar lo que la empresa quiere transmitir a través de sus trabajadores, en sus uniformes, la imagen que quieren entregar y ahí ayudamos nosotras". Convencida de su vocación y muy, muy ejecutiva.
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