Movimiento de Velasco afirma que actual Constitución es legítima

Luego de tres meses de trabajo, el movimiento Ciudadanos -liderado por el ex candidato presidencial, Andrés Velasco-, consensuó su primer documento de propuesta constitucional. El texto -al que se anexarán capítulos más adelante- , propone siete reformas a la actual carta fundamental (ver recuadros a la derecha) y rechaza el actual proceso constituyente iniciado en octubre por la Presidenta Michelle Bachelet.

El documento de seis páginas lleva por nombre "El problema Constitucional" y aunque afirma que la actual Constitución "es ilegítima en su origen formal", advierte que en su ejercicio "es absolutamente legítima en el fondo y la forma".

En este sentido, la compara con la de otros países y menciona las modificaciones sufridas en el transcurso de la historia. "En el caso de la chilena, sus más de 220 reformas -así como las más de 70 de la alemana- la han fortalecido. La Constitución de 1980 no solo existe, sino que funciona y se aplica", dice el texto.

El documento agrega que "no puede ser tener, per se, una nueva Constitución. Lo que deberíamos aspirar es a tener una mejor Constitución y analizar en su mérito la actual, para saber si es necesario derribarla o perfeccionarla".

Acusan ansiedad

El documento de Velasco rechaza tanto el debate actual por una nueva Constitución como el inicio de los diálogos ciudadanos promovidos por el Ejecutivo.

"No podemos reemplazar los virtuosos mecanismos de la democracia representativa (participación de todos a través del voto) por mecanismos participativos pero escasamente representativos (cabildos y otros a los que solo algunos asisten o participan)".

En la misma línea, se advierten dos puntos de "riesgo" en el actual debate instalado en la opinión pública.

"La ansiedad constitucional. El primer riesgo emana de los ansiosos, los que ven en la Constitución una solución para todo (...) El actual desencanto con la política y descrédito de la clase política -y de las élites empresariales, sindicales, eclesiásticas- no se subsana con una nueva Constitución. Se subsana modificando leyes que no tienen carácter constitucional".

Como segundo aspecto de riesgo se menciona "el iluminismo constitucional" entre quienes, según describe el texto, "quieren hacer la Constitución desde cero, en un acto de fe ciega en la ingeniería jurídica (...) Chile no acaba de adquirir la independencia ni viene saliendo de una guerra civil; no hay justificación alguna para partir de cero".

En este último aspecto se concluye afirmando que "las mejores leyes suelen hacerse pausadamente, a través de las modificaciones sucesivas y el ensayo y error".

El texto fue analizado y debatido en ayer por Velasco, quien encabezó un "encuentro ciudadano" sobre el tema con cerca de 40 adherentes en la Fundación Balmaceda.

"Hoy es más sensato debatir reformas. La naturaleza de nuestra República hace que el poder constituyente le corresponda al Congreso y es el Congreso el que debe decidir si quiere o no una nueva Constitución y hasta ahora no lo ha hecho. Es la diferencia entre las monarquías y las repúblicas", explicó el director ejecutivo de Ciudadanos, Sebastián Sichel.