Nace en EE.UU. guagua de embrión congelado hace casi 20 años

<P>El bebé pesó 3,14 kilos y fue dado a luz en mayo, por una madre de 42 años, cuyo nombre se mantiene en el anonimato.</P>




Aunque en teoría un embrión puede permanecer congelado eternamente (sin perder sus facultades de desarrollarse en el vientre de una mujer), 19 años y siete meses es el mayor tiempo en que un óvulo fertilizado y guardado a -196° Celcius se convierte en una guagua que nace completamente sana.

En su último número, la revista científica Fertilidad y Esterilización analiza el caso de una madre (42), que en mayo pasado dio a luz a un bebé de 3,14 kilos en Estados Unidos, a partir de un embrión congelado y donado por una pareja que se sometió a fertilización in vitro en 1990.

"Esta mujer nunca había tenido suerte con sus ciclos de fertilización artificial. Por un tiempo, ella y su marido dejaron de intentarlo, hasta que volvieron con la idea de adoptar un embrión donado. Aceptaron que fuera con embriones que tenían 20 años congelados, porque coincidían físicamente con ellos", comentó a La Tercera Sergio Oehninger, director del Departamento de Obstetricia del Instituto de Medicina Reproductiva de la Eastern Virginia Medical School, donde nació el bebé.

El experto dice que el exitoso parto -que fue natural, tras un embarazo de 32 semanas- prueba que "la técnica funciona, es de buena calidad y que estas células que se mantienen a -196°C están termodinámicamente en un estado de suspensión y que no son afectadas por nada", concluye.

La noticia se conoce una semana después de que el Vaticano cuestionara la entrega del Premio Nobel de Medicina a Robert Edwards por ser "el padre de la primera niña probeta". La jerarquía eclesiástica criticó el galardón por las implicancias éticas que significa manipular embriones humanos y generar lo que denominó el mercado de los ovocitos, con donaciones y compraventas que implican a seres humanos. "Sin Edwards no habría congeladores llenos de embriones a la espera de ser transferidos a un útero, para investigación o para morir abandonados", dijo el presidente de la Pontificia Academia para la Vida, Ignacio Carrasco.

En este caso, la pareja pudo optar a cinco embriones congelados, de los cuales sólo dos sobrevivieron al proceso de descongelamiento. Ambos fueron implantados en la mujer, que finalmente logró llevar a término a uno de ellos.

El experto del Instituto de Medicina Reproductiva de Virginia reconoce que no es común la donación de embriones ni que alguien los tenga por tanto tiempo congelados. "En general, las parejas los retiran a los dos años para usarlos. Esta pareja (la donante) tuvo una guagua al poco tiempo (de someterse a la fertilización), pero mantuvo otros embriones congelados hasta que decidieron no tener más hijos y los donaron", explica.

Pese a lo anterior, Oehninger dice que el tratamiento tiene una gran ventaja: es más económica que la donación de óvulos: "La pareja no tiene que encargarse del proceso de congelación que, obviamente, tiene un costo", dice.

Antes de este caso, el récord lo ostentaba Debbie Beasley, de San Francisco, quien en 2005 tuvo una hija a los 45 años de edad a partir de un embrión que había estado congelado durante 13 años.

En Chile, recién en 1992 comenzaron a hacerse los primeros implantes con embriones congelados. Según explica a La Tercera Ricardo Pommer, experto en fertilización de la Clínica Las Nieves, en nuestro país el récord lo tiene un bebé nacido de un embrión congelado durante nueve años. Aunque desde esa fecha hasta ahora, aclara, la técnica es más segura.

"Antiguamente, congelábamos el embrión al primer o segundo día desde la fecundación. Hoy se hace al quinto día, lo que permite que actúe la selección natural y, por ende, tenemos una mejor calidad de los embriones", dice el experto.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.