Nuevo túnel Chacabuco II reducirá tiempos de viaje hacia el Paso Los Libertadores

A partir del próximo año comenzará la construcción del túnel Chacabuco II, un nuevo enlace subterráneo que ayudará a dinamizar los flujos entre Santiago y Los Andes por la autopista de Los Libertadores (Ruta 57).

La obra, de dos kilómetros de largo, se ejecutará en un tramo paralelo, al oeste del actual túnel Chacabuco I. Contará con dos pistas que atenderán los flujos que se transportan hacia la Región Metropolitana. El actual tunel, con otros dos carriles, será usado por quienes se dirijan en el sentido opuesto.

De esa forma, la autopista aumentará en 5% su capacidad vial por año. Actualmente circulan 8.500 vehículos al día por la ruta.

El proyecto busca disminuir los 49 accidentes de tránsito que ha registrado la ruta en los últimos cinco años y mejorar las condiciones de seguridad de la carretera, cuyo uso ha aumentado, debido a que es la principal vía de conexión hacia el Paso Los Libertadores.

Hoy, la pendiente obliga a los vehículos pesados a transitar despacio, lo que incita a los automóviles a hacer maniobras de adelanto dentro del túnel, que sólo cuenta con una pista por sentido.

El ministro de Obras Públicas, Hernán de Solminihac, explica que la construcción generará una alternativa de emergencia, en caso de cierre de alguno de los enlaces.

"Tenemos hoy un túnel muy importante, que ha prestado servicio por largo tiempo, y que está inserto en una concesionaria que ya tiene doble pista. En ese punto disminuye la capacidad de la autopista", indica el ministro, y agrega que la obra permitirá tener cuatro pistas en toda la carretera internacional.

Se optó por construir otro túnel, porque una ampliación "hubiese sido bastante costosa, porque hay que hacer un túnel bastante más grande para cumplir el diámetro de cuatro pistas. En cambio, en otro túnel se hace un diámetro menor para cubrir sólo dos pistas. Es un tema de costos de construcción y mantener operativo el túnel actual", explica el ministro

El túnel Chacabuco II demandará una inversión de US$ 61 millones y forma parte del plan de mejoramiento de obras, contemplado en la actual cartera de concesiones.

Entre las medidas de seguridad del proyecto se considera una galería de emergencia entre los dos túneles, sistemas de ventilación e iluminación, señalización dinámica y circuito cerrado de televisión.

La construcción de la obra se extenderá por dos años y se estima que podría inaugurarse a fines de 2013.

Mejoramientos

Una vez concluido el nuevo túnel, se iniciará la recuperación del Chacabuco I, que se extenderá por seis meses e involucrará el 10% de los recursos destinados a la construcción del Chacabuco II.

El antiguo túnel data de 1957 y, actualmente, no cuenta con bermas, iluminación de última generación ni espacios de seguridad para la detención de vehículos en su interior en emergencias.