"Pac Man" quiere comerse al mundo

Manny Pacquiao está cerrando en 2010 uno de los mejores años de su carrera. El filipino es considerado el mejor boxeador libra por libra de la actualidad, y uno de los mejores de todos los tiempos, por lo que su recientemente anunciada pelea ante el estadounidense Shane Mosley, por la supremacía del peso welter, el próximo 7 de mayo en Las Vegas, debería volver a alcanzar cifras récord de recaudación y sintonía.

Es que "Pac Man", como es conocido el filipino (nacido el 17 de diciembre de 1978), ha sabido conjugar sobresalientes condiciones naturales con un carisma que ha devuelto el interés a los aficionados en el pugilismo y el propio peleador filipino sabe responder a la atención de la gente: "Yo estoy para darles a los aficionados las mejores peleas posibles. Más que ganar o perder, hay que darle al público una pelea que puedan disfrutar y recordar por mucho tiempo".

Los inicios del boxeador filipino se remontan a sus 16 años, cuando con poco más de 48 kilos animaba veladas de poca monta en locales pequeños de Manila. Sin embargo, pronto llamó la atención de Vintage Sports' Blow by Blow, un salón de boxeo, donde el 22 de enero de 1995 disputó su primer duelo rentado, ante Edmund Enting, ganando por decisión unánime y escalando hasta ser la estrella del programa pugilístico de la sala.

Así comenzó a subir en las clasificaciones. Pacquiao ganó sus primeras 11 peleas antes de sufrir su primera derrota ante Rustico Torrecampo, una pelea que el filipino enfrentó con escasa preparación y calzando unos guantes que le desacomodaban.

El primer traspié no frenó la ascendente carrera de "Pac Man", quien pronto comenzó a sobresalir por su talento y una pegada poderosa. Así, logró hacerse un nombre tras sus peleas contra rivales mexicanos, Juan Manuel Márquez, Marco Antonio Barrera y Erick Morales, considerados entre los mejores de su categoría.

"Es importante enfrentar a los mejores peleadores del mundo y eso es algo que yo he hecho durante los últimos años con mucho éxito", dijo Pacquiao en una verdadera declaración de principios acerca de su manera de ver el boxeo.

Sin embargo, la entrada de "Pac Man" a las grandes ligas ocurrió el 6 de diciembre de 2008, cuando enfrentó a Oscar de la Hoya y lo venció por nocáut técnico en el octavo round, forzando el retiro definitivo de "Golden Boy", en la que fue conocida como la pelea de ensueño. Sólo por ingresos de entradas se recaudaron 17 millones de dólares (la segunda más alta de la historia) y el filipino recibió una bolsa cercana a los 30 millones de la divisa.

Posteriormente, venció a Ricky Hatton por la corona de los superligeros y este año obtuvo la corona de los superwelter al superar a Antonio Margarito.

Aunque el anuncio de su combate ante "Sugar" Shane Mosley causó expectación, y se esperan una alta recaudación y sintonía televisiva, su gran deuda es la pelea con el invicto Floyd Mayweather Jr., la que no parece factible próximamente por los problemas judiciales de "Pretty Boy".