Para Borghi el amistoso no es clave para su futuro

Tranquilo. A diferencia de su último encuentro con los medios de comunicación en octubre, Claudio Borghi se mostró relajado en la sala de prensa del AFG Arena de Sankt Gallen, donde jugarán mañana Chile y Serbia.

Para el entrenador, este partido no determinará su ciclo al mando de la "Roja". A pesar de que haya viajado a Suiza gran parte del directorio de la ANFP, para realizar una evaluación en terreno a su trabajo. "El partido, como todo amistoso sirve para probar alternativas, pensando en las clasificatorias. No es el sentido del encuentro hablar de que si pierdo me tengo que ir o si gano se debe extender mi contrato", afirmó.

El relajo del "Bichi" contrasta con el emplazamiento realizado hace algunas semanas por el timonel de la asociación, Sergio Jadue, quien afirmó que el estratego tenía la obligación de llevar a Chile a la próxima Copa del Mundo. "Es lindo decir obligación, pero aquí no hay ultimátum de ningún tipo".

Ni siquiera las sugerencias hechas por el directorio en la reunión de más de tres horas, sostenida el 22 de octubre, variaron el estado de ánimo del estratego. De hecho, Borghi descartó que la presencia masiva de la cúpula directiva en Sankt Gallen responda a una evaluación a su labor. "Leí que los dirigentes quieren supervisar mi trabajo, eso lo pueden hacer todos los días en Santiago. Hay mala intención al dar esa interpretación, ya que siempre los directivos acompañan al equipo. Las puertas de Juan Pinto Durán siempre están abiertas para los dirigentes si quieren conversar. Con el presidente hablo siempre, no tengo problemas en charlar con nadie", sostuvo Borghi ante la sugerencia de un mayor diálogo con los mandamases del fútbol chileno.

No obstante, el seleccionador admitió cierta división entre los miembros del directorio. "Siempre cuando hay un respaldo público te terminan echando, necesito su apoyo desde atrás, si estoy aquí es porque hay mayoría, pese a que puede haber gente que no este de acuerdo"

Otro aspecto que aclaró tiene relación con las aprensiones dirigenciales respecto al manejo disciplinario. Borghi descartó modificar su sistema. "No voy a cambiar, seguiremos de la misma forma. Todos pasamos por momentos buenos y malos, la idea es acercarnos nuevamente al grupo que pelea la clasificación. No estoy cerca de irme de la Selección, ya que sigo teniendo la convicción de llegar al Mundial", agregó.

Sobre los fantasmas del ciclo anterior revividos por Mauricio Isla, quien reconoció que el equipo debía recuperar el juego exhibido durante el proceso de Marcelo Bielsa, el DT descartó problemas con el volante. "Respeto su reflexión. Eso demuestra que nosotros no obligamos a nadie a decir ciertas cosas, no lo hice tampoco para pedir que los jugadores me apoyaran tras la derrota con Argentina".

Los fríos aires de Sankt Gallen le han devuelto algo de tranquilidad al "Bichi", quien analiza los próximos partidos ante Perú y Uruguay. Para el DT los "charrúas" son "un rival directo que debemos vencer y recuperar los puntos perdidos ante Colombia".