Parenthood: la receta tras la taquillera serie familiar

A la serie Parenthood le sobran laureles. Se trata de una adaptación televisiva de la recordada película del mismo nombre, protagonizada por Steve Martin; uno de sus productores en el director Ron Howard, y reúne a uno de los elencos de mayor calidad en la pantalla actual, con rostros como Peter Krause (Six feet under), Lauren Graham (Gilmore girls), Craig T. Nelson (La propuesta), Erika Christensen (Traffic) y Monica Potter (Patch Adams).

Pero uno de sus créditos menos llamativos aunque más fundamentales es Jason Katims, el productor ejecutivo y encargado del día a día de la serie que se emite por Liv (señal 59 de VTR y 372 de Movistar), los jueves a las 23 horas. Porque Katims es el responsable de uno de los mejores show de los últimos años, Friday night lights, donde hace gala de su buena mano para abordar con matices y profundidad las familias y sus relaciones.

Ese es, precisamente, el tema central de Parenthood, que cuenta los problemas y triunfos del extenso clan Braverman, donde hay hermanos, hijos y padres de todas las edades. "Una de las claves para mí es que quería hacer un show donde hubiera un elenco donde se pudieran ver muchos puntos de vista, y así obtener un panorama más completo que da un lienzo más grande con el cual trabajar", dice Katims a La Tercera, sobre uno de los ingredientes principales de la receta del programa. Y su intención dio frutos, porque hace un par de semanas, la cadena NBC confirmó un segundo ciclo para el programa.

Otro de los elementos que el productor destaca sobre su fórmula es haber podido reunir al taquillero elenco que protagoniza el programa. "Cada uno podría tener su propio show. Por eso, tener este calibre de talento en un solo lugar nos dio una buena oportunidad de éxito".

Además, Katims explica que quiso incorporar temáticas actuales a la típica mezcla de los dramas familiares. "Cosas que no se han explorado mucho, como tener un hijo con Asperger (una especie de autismo), que hace 10 años los canales no te habrían dejado incluir. Me pareció actual e interesante hablar de ese tipo de cosas", explica. Todo con un tono que busca mezclar lo "liviano" y la comedia con el melodrama. "Quería hacerlo sentir muy real, con situaciones lo más verdaderas e identificables posible. Y calar profundo", remata.