Pebble Beach: donde el pasado y futuro se visten de gala

Si el Concorso d'Eleganza Villa d'Este, a orillas del lago Como, en Italia, es la gran cita anual que tienen los amantes de los autos clásicos en Europa, a este lado del mundo es el Concurso de Elegancia de Pebble Beach la muestra imperdible de coches de colección. Y así lo confirmó el fin de semana pasado en su 62 edición, la cual reunió a más de 200 ejemplares en el exclusivo club de golf californiano en Monterey, Estados Unidos.

En esta oportunidad, el Mercedes Benz 680S de 1928 carrozado por Saoutchik (foto principal) fue quien se llevó todos los aplausos, tras coronarse como el mejor coche del concurso, que evaluó el estado mecánico, preservación de materiales originales y, por supuesto, la elegancia y exclusividad de cada ejemplar en competencia.

Eso sí, también hubo otros autos que captaron fuertemente la atención de los asistentes. Y es que hoy Pebble Beach no sólo es una vitrina para los autos de época más distinguidos del orbe, sino también para exclusivas primicias mundiales.

Cada año más marcas acuden a esta selecta cita, ya sea con algún nuevo modelo, alguna edición especial o espectaculares prototipos, que apuntan directamente al perfil de personas que se congrega aquí, donde una simple entrada cuesta 250 dólares, poco más de 120 mil pesos.

Shelby, por ejemplo, celebró su medio siglo de vida con una exposición de modelos históricos, pero también con una creación única, hecha en colaboración con Ford Racing. Se trata del Shelby GT500 Cobra 2013, un Mustang modificado y potenciado hasta nada menos que los 850 caballos de potencia.

Dentro de los prototipos, el McLaren X-1 Concept, probablemente, fue el que atrajo más miradas, con una carrocería basada en el MP4-12C, completamente de fibra de carbono, y look atemporal y con cierto toque clásico, según la marca. Sólo se construirá una única unidad por encargo de un cliente muy especial.

La división de altas prestaciones del Grupo Chrysler, SRT (Street Racing Technology), estrenó en Monterey el Viper GTS Launch Edition, una edición especial del deportivo, de la cual se fabricarán unas pocas unidades y que se distingue por una carrocería en color azul con bandas blancas y llantas especiales, entre otros.

Lamborghini, por su parte, llevó el Sesto Elemento, como modelo ya de producción y del cual se fabricarán sólo 20 unidades, cada una con un precio de cercano a los 2,1 millones de dólares. Junto a él, se posó el Urus, el primer SUV de la casa del toro y que aún se encuentra en su fase conceptual.

Finalmente, la edición especial desarrollada entre BMW y el prestigioso carrocero italiano Zagato sobre la base del Z4 y que se presentó en versión coupé en Villa d'Este, ahora se lució en Pebble Beach en variante descapotable.

Tampoco faltaron los Bugati Veyron, Aston Martin, Bentley, Rolls Royce, entre otros, todos candidatos serios a llevarse el trofeo del Mejor Auto del Concurso de Elegancia de Peeble Beach en muchos años más.