Perú prohíbe relaciones gays y adulterio a los policías y desata críticas

Para el gobierno peruano es "un paso adelante en la moralización" de la policía. Y no sólo eso. Será un "punto de quiebre" en la historia policial peruana. Esta semana entró en vigencia una nueva ley de Régimen Disciplinario en Perú cuyo objetivo principal será mejorar la deteriorada imagen, que tiene la policía entre los ciudadanos. Entre las medidas más polémicas figura la prohibición a la presencia de homosexuales y adúlteros en la institución, algo que los analistas han considerado como muy drástico. La nueva norma fue propuesta por la ministra del Interior, Mercedes Cabanillas, a quien la prensa local ha bautizado como la "Dama de Hierro" o la "Margaret Thatcher" peruana.

"Ahora todo eso se acabó", afirmó Cabanillas al hablar sobre las "malas prácticas" en la policía peruana. La ley establece que cualquier funcionario que tenga relaciones sexuales con alguien del mismo sexo será suspendido indefinidamente del organismo y lo mismo les ocurrirá a quienes tengan relaciones extramatrimoniales. De acuerdo con el gobierno, estas acciones son consideradas como causantes de escándalos y contribuyen a denigrar la imagen de la institución. Según la ministra, esas medidas constituyen "el punto de partida para recuperar la imagen policial".

Sin embargo, algunos críticos señalan que las normas son inconstitucionales. "Los sectores más conservadores y retrógrados de la policía son los que han vuelto a redactar este tipo de régimen disciplinario. Ellos (los conservadores) no se preocupan por la corrupción policial, sino por este tipo de cosas que, además, son hipocresías", dijo Fernando Rospigliosi, ex ministro del Interior. También asociaciones gays criticaron la nueva ley.

Cabanillas destacó que la nueva política busca sancionar drástica y efectivamente a los efectivos policiales que cometan alguna de esas infracciones, lo que contrasta con las normas disciplinarias anteriores, que, a juicio de la ministra, eran "permisivas, condescendientes y encubridoras". Para los analistas, el machismo tradicional peruano implica que son muy pocos los casos conocidos de homosexualidad dentro de la policía. Sin embargo, la nueva ley ya ha provocado debate, dado que violaría el respeto a los DD.HH.

Al mismo tiempo, la ley establece la separación de la institución para los policías involucrados en casos de corrupción y dispone que las investigaciones alcancen a todo el personal. También acaba con la figura de la prescripción. Además, serán destituidos quienes falsifiquen datos de investigación, el no reporte de bienes ilícitos allanados, el acoso sexual contra subordinados y la incitación a adoptar medidas de protesta.

Otra de las medidas que fueron criticadas por asociaciones de prensa tiene que ver con la prohibición que tendrán los policías para "emitir opinión o informar a través de los medios sin autorización de su director general". Por otro lado, a partir del próximo 1 de julio cualquier peruano podrá arrestar a un delincuente, siempre que lo encuentre en flagrante delito.