Potencian Termas Malleco como destino emergente en IX Región
<P> Junto con los atractivos incipientes en Traiguén y Freire conforman una nueva apuesta turística.</P> <P> Son las únicas termas de Latinoamérica que se abastecen con agua de géiseres a 86°C.</P>
Siete centímetros de nieve cayeron ayer en las Termas Malleco, comuna de Curacautín, en la IX Región. El paisaje blanco resalta aún más con la cortina de vapor que emerge violentamente desde su particular fuente de agua termal: ocho potentes géiseres que emergen a 86 grados de temperatura y gran presión, desde una gruta natural en la base del río Dillo, y que abastece sus tres piscinas. "Aquí las personas disfrutan de estas aguas termales al aire libre, rodeadas del verde de las araucarias milenarias, el vapor de los géiseres, la nieve, en una experiencia única, que se puede mezclar con trekking y avistamiento de cóndores", explica la jefa comercial de las Termas Malleco, Nancy Bascuñán.
El agua de los géiseres es conducida a las piscinas, donde se mezcla con agua del río para rebajar su temperatura a 37 grados en promedio. Estas aguas son carbonatadas, sulfuradas y alcalinas en su composición, por lo que son aprovechadas mayormente por adultos mayores con fines medicinales. La temperatura del agua es usada también para calefaccionar las habitaciones del refugio y la loza radiante que rodea las piscinas para caminar descalzo durante el invierno.
Destinos emergentes
Las Termas Malleco son las únicas en Latinoamérica que se abastecen de este particular modo. Sus géiseres son su principal factor diferenciador con el resto de la oferta termal de la región y también un gancho para diversificar la oferta turística al interior de La Araucanía. Es lo que ocurre también en Traiguén, según señala el director regional de Sernatur, Sebastián Alvarez. "Traiguén siempre ha sido una comuna maderera, pero ahora están rescatando turísticamente las tradiciones y comida de la colonia suiza que vive ahí, al igual que en Capitán Pastene se rescata la tradición italiana", sostuvo. Además se proyecta desarrollar el enoturismo aprovechando las dos viñas de chardonnay más australes del país.
Por otra parte, Quepe, localidad de la comuna de Freire, acogerá al nuevo aeropuerto internacional de la región, lo que en opinión de Alvarez será un motor para el desarrollo de servicios de alojamiento, comida, y entretención en toda la zona.
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