Propaganda y publicidad




Señor director:

Equivocadamente se ha instalado el concepto de publicidad electoral en vez de propaganda, al referirse al despliegue de artilugios de los candidatos para obtener un puesto de representación política en la administración del país.

Sin entrar en definiciones académicas, el objetivo de la publicidad es comunicar las bondades de un producto o servicio, con el fin de que éste sea adquirido por los consumidores. En cambio, la propaganda busca propagar ideas o ideologías para influir en las decisiones de tinte político y valórico de los ciudadanos; es decir, la propaganda no busca vender un producto o servicio, sino mover al elector en la búsqueda de soluciones a sus problemáticas.

Los chilenos sabemos discriminar. No hemos comprado productos de marketing. De hecho, los hemos desechado al comportarnos como ciudadanos que deben elegir un programa de gobierno a ser posteriormente implementado.

Ad portas de una segunda vuelta vale la pena esta aclaración para entender que estamos próximos a volver a ejercer nuestro derecho como ciudadanos y no como consumidores.

Claudio Ibáñez González
Dir. Centro de Economía para la Gestión U. Central de Chile

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