Rector de la Universidad Adolfo Ibáñez: "Vivaldi está preocupado de defender su cartel a cualquier costo"

El rector de la U. Adolfo Ibáñez, Andrés Benítez, cuestionó las críticas que hizo su par de la U. de Chile, Ennio Vivaldi, hacia el sector privado de la educación superior, quien dijo a La Tercera que las instituciones privadas ven la educación como un negocio.

¿Qué piensa de las críticas que hizo el rector de la U. de Chile ante la posibilidad de que tres Ues. estatales queden fuera de la gratuidad?

Hay muchas razones para compartir su enojo, partiendo la infinita capacidad de improvisación que tiene este gobierno, pero lo que a Vivaldi le preocupa es sólo un punto: que bajo el nuevo esquema, tres universidades estatales quedan fuera de la gratuidad. Vivaldi, como presidente del Consorcio de Universidades Estatales, sale en defensa del club o verdadero cartel en que se han transformado estas instituciones. Bajo ese prisma, dice que es inaceptable que no haya gratuidad para todas las universidades estatales. "Todos o ninguno" dijo al final de una reunión del Cuech, añadiendo que no va a aceptar que queden tres universidades "denostadas o humilladas".

¿No le parece bien que defienda a los planteles del Estado?

Se trata de una actitud insólita y sólo refleja hasta donde Vivaldi está dispuesto a defender el cartel que comanda. Si tres universidades de su "club" quedan fuera de la gratuidad, es porque no cumplen el requisito mínimo de calidad impuesto ahora por el gobierno: tener como mínimo cuatro años de acreditación. Nadie las está humillando ni denostando. Es una realidad. Pero a él, nada de eso le importa. Dice que se trata de universidades "impecables" y llama a los jóvenes a que no piensen que son de peor calidad que el resto.

¿Esas tres Ues. no son de calidad?

La fantasía tiene un límite y el rector Vivaldi los cruza todos. Él es un ferviente defensor de la acreditación cuando se trata criticar a la privadas, pero cuando le tocan a uno de los suyos -las estatales- señala que no va a aceptar que se hagan mecanismos diferenciados en función de la acreditación o cualquier otro criterio. En suma, para él, lo estatal está por sobre todo. Libera a esas instituciones incluso de entregar educación de calidad. Eso es realmente inaceptable y refleja que el rector no está preocupado de la calidad de la educación, ni de los estudiantes, sino de defender su cartel a cualquier costo. Por eso, más que llamar a los estudiantes a no creer en la acreditación, lo que debe hacer es llamarlos a preocuparse de la calidad de esas universidades. Lo demás es engañarlos. Y más que despotricar contra el sistema privado, debiera ocuparse de resolver los problemas que tienen sus universidades, las estatales.

¿Usted cree que esas instituciones estatales no merecen estar en la gratuidad?

El rector también critica que las universidades cuestionadas entren al sistema de gratuidad "por la ventana". Y tiene razón que eso no debe ser así. Sencillamente no deben entrar. Por eso, la idea del gobierno de pasarles plata a esas universidades es un escándalo. No puede ser que se fijen criterios y luego el mismo gobierno los anule por secretaría. Eso no tiene nombre. Es un engaño más a todos.

¿Estima que debe haber un trato igualitario para todas las instituciones de educación superior?

Creo que todos los alumnos deben ser tratados igual y las instituciones deben ser tratadas de acuerdo a su complejidad y calidad. Por lo tanto, no es que todas las instituciones tengan que ser tratadas igual, y yo incluso entiendo que las estatales pueden tener algún grado de mayor compromiso del Estado, pero en el caso de la gratuidad no estamos hablando de instituciones como cree el rector Vivialdi, estamos hablando de estudiantes de menores recursos. Y en ese caso, las instituciones deben ser tratadas iguales en el sentido de que los requisitos deben ser los mismos para todos.

En el caso de la U. Adolfo Ibáñez, ¿estará dispuesta a entrar a la gratuidad si esta se abre para todas las instituciones de más de cuatro años de acreditación?

Nosotros no estamos disponibles para este año, porque quedan pocos días para decidirlo y es un plazo mínimo y ni siquiera sabemos cuáles serán los aranceles. Además, como nos acaban de quitar el AFI nuestra capacidad de financiamiento se ha visto muy reducida. Y tercero porque creemos que lo razonable es esperar el proyecto de reforma a la educación superior que fija las condiciones permanentes.