Rehabilitando a través de un espejo

<P>El descubrimiento de las neuronas espejo está siendo utilizado por dos chilenos para mejorar la calidad de vida de quienes padecen el peculiar dolor del miembro fantasma. </P>




A Jaime le apretan los zapatos. Lo curioso es que luego de sufrir un accidente sus dos pies fueron amputados, pero de igual forma le molestan los zapatos.

Eduardo Muñoz es su psicólogo y antes de iniciar cada terapia él debe desabrochar los zapatos de Jaime para que sienta alivio. El diagnóstico: dolor del miembro fantasma.

"El dolor del miembro fantasma es el que persiste la persona en la parte faltante tanto de la pierna como del brazo", explica Eduardo.

Eduardo, que tiene un magister en Psicología de la Salud de la Universidad Católica, cuenta que iba en el metro cuando se le ocurrió una idea que hoy lo ha hecho ser pionero, junto a su socio Luis Quiroga -diseñador 3D- en el área de rehabilitación.

Utilizar las neuronas espejo para curar y mejorar la calidad de vida de personas con alguna extremidad amputada, es un método utilizado en el mundo de una forma básica y que ya llegó a Chile.

Eduardo y Luis son unos visionarios. Tomaron las teorías y "se subieron al carro de la ciencia", como relatan ellos, para crear la denominada nave espacial que utilizan en sus terapias.

Su proyecto "Neuroespejo" utiliza la particularidad de este tipo de neuronas de activarse cuando la persona afectada por el dolor del miembro fantasma ve a otra realizando alguna acción en específico. Por ejemplo bostezar.

Es por esta razón que se dice que las neuronas espejo son las células de la empatía.

"Lo que hacemos es poner a la persona que ha sufrido alguna amputación frente a pantallas led y proyectamos, por ejemplo, la mano que le falta", explica Luis.

Para la comunidad científica estas neuronas son el descubrimiento más importante en la última década para la neurociencia.

"Lo que se consigue con esta terapia es lograr una movilidad de la extremidad fantasma, acabando con su rigidez y de la misma forma se termina con el dolor que esta provoca a la persona afectada", describen los fundadores de Neuroespejo.

Alicia perdió sus dientes en un accidente automovilístico. Luego de su recuperación quiso ponerse un implante definitivo para poder volver a sonreír, pero el dolor fantasma de las piezas perdidas se lo impedían.

"Fue difícil, tuvimos que proyectar la imagen de una radiografía de sus dientes", explican.

Lo llamativo de esta terapia fue que al momento de ver sus dientes, Alicia recordó el momento del accidente. "Se acordó que iba incómoda en la micro antes del impacto y de muchos otros detalles que su memoria había encriptado", relata Luis.

Pioneros

"No nos fue difícil conseguir financiamiento, pero estamos en una sociedad y una época donde son pocos los proyectos orientados a la salud", afirman. Eduardo comenta que en este momento pueden financiar su proyecto gracias a un capital semilla que lograron conseguir a través de la incubadora Innovo USACH, en donde son el único proyecto destinado a mejorar la calidad de vida de personas con discapacidad.

Pero no siempre contaron con este apoyo, "nosotros partimos con Neuroespejo (.cl) en junio de 2014 y netamente con capital propio. En estricto rigor aún no hemos visto un retorno de ese capital", sentencia Eduardo.

Estos dos emprendedores no son todo el equipo. Neuroespejo está conformado por cuatro profesionales más: Nicolás Zalaquett, doctor en física que maneja el software que hace posible esta terapia, Glia; Rodrigo Costa, diseñador industrial; Tomás Rock,ingeniero comercial de la empresa, y Elena Barindelli.

"Nuestra meta es poder llegar a industrializar este producto. Tenemos un recurso primero inagotable que son la neuronas espejo y ya tenemos conversaciones con futuros inversionistas", asegura Eduardo.

Desde la academia también han tenido una buena recepción y ya han participado en algunos congresos. "Estuvimos en un seminario en una universidad de Argentina presentando el caso de Alicia y nos fue muy bien", detallan.

Hasta el momento están esperando los últimos trámites para recibir el documento que acredita que la idea de la "nave espacial" fue patentada. Este módulo es capaz de mejorar la calidad de vida, no solo de personas con amputación de alguna de sus extremidades, también de "quienes han sufrido de accidentes cardiovasculares, o tienen autismo, estrés post-traumático e incluso anorexia", afirman Eduardo y Luis.

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