Restaurante Normandie no cerrará por construcción de torre

A las 6 de la mañana del jueves una insistente llamada telefónica despertó a Jorge Cordero, dueño del restaurante Normandie (Providencia 1234). Un amigo quería expresarle su solidaridad por el cierre del local abierto en 2003.

Dos horas duró el estupor de Cordero. A las 9 A.M. logró comunicarse con los dueños de la sucesión Ghivarello, la que no sólo arrienda el espacio al Normandie, sino también al Teatro Nescafé, la gelatería La Escarcha y cinco locales comerciales más, y confirmó que todo era un error: el Normandie no forma parte del paño de 3.600 m2 que alberga el restaurante El Parrón y el teatro Circus OK, del humorista Coco Legrand, además del café Da Roncallo y la pizzería Spiazzo. Los cuatro deberán bajar sus cortinas y mudarse, a mediados del 2012. No así el Normandie.

Claro que Eric Jenkin, el encargado del restaurante, no oculta su temor: "Por el momento no nos vamos. Pero con ese nivel de ofertas inmobiliarias, no creo que logremos resistir unos cinco años más". De conseguirlo, eso sí, Jenkin sabe que la construcción del edificio y centro comercial de 20 pisos de altura sólo puede traerle beneficios: "Tendremos más movimiento y oficinas".

Su vecino El Parrón (Providencia 1184) no corrió con la misma suerte. "En un año y medio más cerraremos", dice su gerente, Fredy Stehberg. El cineasta Raúl Ruiz, el poeta Waldo Rojas y el escritor Germán Marín son algunos de los viudos del restaurante fundado en 1936. Ellos formaron el grupo "Los Chanchos" en los 60. En sus reuniones, que se realizaban en lugares como El Parrón, hablaban de política, literatura y cine. También comían hasta el hartazgo. "Llamábamos por teléfono y el grupo se ampliaba. Empezábamos temprano, tipo una de la tarde, y terminábamos a las cuatro de la mañana del día siguiente", recuerda Germán Marín. "Era divertido. Pero más divertido era cuando había que pagar la cuenta. Siento que desaparezca otro rincón del Santiago antiguo" .