Ryan Giggs reescribe la historia

Nunca imaginó Ryan Joseph Wilson Giggs, cuyo apellido paterno desaparecería tras la separación de sus padres en 1989, que el 2 de marzo cobraría un valor incalculable en su vida futbolística teñida con el color rojo de Manchester United.

Fue un 2 de marzo de 1991, cuando sus regates y enorme velocidad de piernas dejaron boquiabiertos a los hinchas de los "Diablos Rojos", que lo vieron debutar oficialmente frente a Everton. Mientras los fanáticos del United lo bautizaban como el nuevo George Best, sir Alex Ferguson sonreía en la banca, recordando el llamado telefónico con el que lo convenció para aterrizar en el club, algunos años antes.

Ryan Giggs, 39 años, jamás imaginó esa tarde que otro 2 de marzo, pero de 2013, estaría a las puertas de disputar su partido número 1.000 como profesional, incluyendo club y selección, lo que puede suceder hoy frente a Norwich City, en Old Trafford.

Sin embargo, si no lo logra tendrá más opciones. Ayer se confirmó su renovación por un año, lo que le permitirá sumar 24 temporadas en el club, confirmándose como uno de los jugadores que más tiempo han vestido sólo una camiseta. Le faltará una más, eso sí, para alcanzar al italiano Paolo Maldini (AC Milan).

Vitrina completa

Su exitosa carrera puede resumirse en tres ítems. El primero tiene que ver con la cantidad de títulos obtenidos con United: 34, en total, más que cualquier otro.

Además, convirtió y participó en cada una de las temporadas de la Premier League, que se inició en 1992. Por si fuera poco, jamás fue expulsado. La única roja la vio con su selección.

Como dato extra, el día de su estreno, dos compañeros del actual plantel aún no habían nacido: Phil Jones y Nick Powell. Y otros como Danny Welbeck, David de Gea y Rafael, no habían llegado al año.

La Copa del Mundo será siempre su gran deuda. Pero su legado es imborrable.