Sepa en qué tiene que fijarse antes de comprar un televisor 3D
<P>El año pasado eran un lujo. Hoy se pueden conseguir desde los 400 mil pesos, aunque con distintas funcionalidades y calidades.</P>
El 2010 llegó a Chile el primer televisor 3D del mercado. Su precio bordeaba los dos millones de pesos y sólo estaba disponible en 50 o 60 pulgadas. Llevar la experiencia del cine 3D a casa era un lujo.
Pero este año, justo para la esperada renovación de equipos antes del incio de la Copa América, las compañías presentaron una nueva camada de televisores con atractivos precios, en los que se incluyen los 3D. Según estimaciones de LG, la cuota de mercado para estos modelos saltará de 1% a 7% este año. Pero antes de tentarse, tenga en cuenta varios factores para dar el paso correcto en esta nueva dimensión.
Qué se puede ver
Antes de pensar en un TV 3D, debe saber qué puede ver en éstos. Si bien los aparatos soportan tanto contenido 2D como 3D, obviamente la inversión se hace para ver este último.
Actualmente, la mayoría del contenido se ecuentra "envasado", es decir, disponible en discos. Las películas en 3D son ediciones especiales en formato Blu Ray (debe tener un reproductor para poder verlas) y son las mismas versiones que aparecen en el cine. Bazuca cuenta con 12 películas y BlockBuster con cuatro.
VTR es la única que ofrece contenido 3D directamente a su televisor, aunque su oferta es limitada. Por su sistema VOD es posible encontrar títulos de Playboy o videos musicales, aunque la empresa agregará más opciones en el año.
En la consola PlayStation3 existen más de 30 juegos compatibles. El sistema sirve, además, como reproductor de películas en este formato.
¿Activo o pasivo?
Lo primero que hay que tomar en cuenta es la tecnología que se usa, algo que hasta el año pasado no era necesario, pues todos usaban la misma: lentes activos, gafas con batería que se comunican con el televisor y, a través de un sistema de parpadeo -60 veces por segundo-, permite que cada ojo vea una imagen distinta. Luego, la mente se encarga de hacer el efecto 3D. Si bien hay que cargarlos, suelen durar entre 50 y 70 horas y se recomienda probarlos antes, sobre todo a quienes usan lentes ópticos.
Pero este año, LG introdujo un nuevo concepto: los lentes pasivos, la misma tecnología que se usa en los cines, donde los lentes son sólo un filtro que hace que la mitad de las líneas de la imagen se vean en un ojo y la otra mitad en el otro. El sistema llegó con un fin: abaratar costos y hacer la tecnología más accesible.
Son livianos, y cómodos para quienes usan lentes ópticos, ya que se colocan encima.
Al comparar ambas tecnologías, la primera diferencia es la calidad de la imagen. La activa supera a su rival, ya que la imagen mostrada en cada ojo está en Full HD. La pasiva, en cambio, como tiene que dividir la imagen en dos, pierde calidad en la definición, aunque el efecto es el mismo.
Pero la mayor calidad de los activos tiene un costo: si hay movimientos muy bruscos de cabeza, la imagen tiende a oscurecerse. El pasivo, en cambio, permite más movimiento.
También son más adecuados para una familia, porque además del precio, es suficiente para niños que buscan más bien el efecto 3D que calidad de imagen. Los activos, en cambio, son para usuarios más exigentes, fanáticos del cine o gamers. Eso sí, se recomienda probarlos al menos 10 minutos para ver si el parpadeo produce dolor de cabeza.
Tipo de televisores
Elegida la tecnología, la pregunta es: ¿qué modelo?
Los plasmas son los más baratos, sobre todo para mayores tamaños, y destacan por su gran contraste de negros, ideal para ver cine. Por ahora, no existen modelos plasmas pasivos, aunque por las características de sus pantallas, funcionan mejor con los lentes activos.
La tecnología LED en cambio, tiene otros beneficios: más colores, mayor eficiencia energética, pero, sobre todo, más brillo. Esto lo hace especialmente apto para la tecnología 3D, considerando que ambos tipos de lentes utilizan filtros que nublan la vista y hacen que la imagen se vea más oscura.
De hecho, una de las recomendaciones es no salir de la tienda sin probar el máximo nivel de brillo de la pantalla. Está probado que las imágenes en 3D se oscurecen entre un 20% y 30% con los lentes puestos. Por lo que si lo que ve en brillo máximo, no lo convence, menos lo hará en 3D.
Lo demás funciona como en un televisor tradicional. Todos los modelos lanzados este año incorporan internet TV, para navegar en aplicaciones como YouTube, por lo que aún sin 3D, son buenos equipos.
La distancia
La inclusión de modelos de 32 pulgadas es uno de los factores que ha permitido bajar el precio. Hoy se pueden encontrar televisores 3D plasma de 42 pulgadas a $ 400 mil o LED de 32 pulgadas a $ 450 mil. Los televisores pasivos, en cambio, parten desde las 42 pulgadas a $ 600 mil. Pero, además del precio, debe considerar la "distancia ideal" a la hora de decidir el tamaño de su compra: desde dónde el aparato genera la mejor imagen.
Debe tener en cuenta la separación que habrá entre el TV y su asiento. Las distancias son estrictas: si es de muy cerca, la imagen pierde definición; si se ve de muy lejos, se pierden detalles. La norma es la siguiente: para 32 pulgadas, 2,4 metros de distancia; para uno de 42 pulgadas, 3,2 metros; y, para uno de 50, 3,8 metros.
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