Si responde estas 10 preguntas, es que conoce a su hijo

<P>Según la escritora Shana Connell, si sabe las respuestas de al menos 10 de las 100 interrogantes que plantea en su nuevo libro, puede presumir que sabe de su hijo. Si no, preocúpese.</P>




HACE un par de años, Shana Connell decidió salir a comer con su hijo de ocho años. Mientras estaban en el restaurante, trató de hilar una conversación con él, una tarea que no siempre le resultaba fácil. "¿Cómo te fue en el colegio?", preguntó. La respuesta fue estándar, automática, y por supuesto, predecible: "Bien".

Intentó un par de interrogantes más, pero las réplicas fueron similares. Tratando de que la comida no se convirtiera en un monólogo, hechó mano a una estrategia distinta: dejó de lado el habitual "qué tal tu día". "Le pregunté cuál fue su primer recuerdo o cuál era su palabra preferida", relata Connell a La Tercera.

Así supo que el primer recuerdo de su hijo fue una caminata en un muelle durante unas vacaciones, en el que podía ver el agua a través de los tablones y que si fuera un animal, sería un tigre. "¿Por qué? le pregunté, esperando que me dijera que son animales feroces, inspiran miedo y respeto. Pero me contestó 'porque quiero ser como Hobbes, el de mi libro de historietas Calvin y Hobbes. Es divertido y es un amigo leal', me argumentó", cuenta Connell.

Locuaz, extravertido, distinto, el niño se abrió a un mundo que Shana Connell desconocía por completo. Esa noche, confiesa, por fin conoció a su hijo.

Sus respuestas le sorprendieron tanto, que asegura haber aprendido más de su hijo en una noche que en muchos años.

Apenas regresó a su casa, decidió anotar todo lo que le había contado en una libreta (al menos todo lo que pudiera recordar hasta ese minuto) y siguió por varias semanas repitiendo la terapia, formulando preguntas que escaparan de los patrones habituales que uno le hace siempre a un niño. Asegura que su hijo estaba ávido de que su madre le hiciera más preguntas y repitió el cuestionario con su hija menor, de cinco años. "Creo que es difícil para los padres ponerse a pensar en preguntas que pueden hacerles a sus hijos. Los padres están tan ocupados hoy, que no hay mucho tiempo para sentarse a conversar con sus hijos, pero a los niños les encanta conversar con su papá o su mamá. Es un momento muy especial que puede pasar con sus hijos, no importa lo ocupado que esté", dice.

Nace un libro

Haciendo todo este análisis y teniendo apuntadas muchas de las preguntas que les formuló a sus hijos, "me di cuenta de que tenía la base para un libro que todo padre necesita, un libro de las preguntas que le ayudarán a conocer a sus hijos".

Fue así como concibió Cómo conocer a tu hijo (Abrams Publishing, 2011), con 100 preguntas que debiera saber responder para saber que tan bien conoce a su hijo.

Pero, ¿cómo lograr que un niño responda cuál fue su primer recuerdo, si apenas contesta cómo le fue en el colegio? Connell dice que las interrogantes de su texto fueron diseñadas con ayuda de dos sicólogas y que es parte del trabajo de padre, lograr que las respondan.

Según la autora, su pregunta favorita es ¿cuál es tu primer recuerdo? "Los niños tienen recuerdos muy tempranos, incluso de cuando son muy pequeños. Es importante hacer esta pregunta cuando son jóvenes, porque al crecer olvidan estos recuerdos iniciales", dice (ver recuadro).

De la centena de interrogantes, Connell recoge las 10 más importantes (que puede adaptar según la edad del menor) que debiera dominar para decir con cierta propiedad que realmente conoce a su hijo. Apunte:

1. ¿Qué es lo más difícil de ser un niño y qué es lo mejor? ¿Crees que es más fácil ser un niño o un adulto?

2. ¿Qué es lo más bonito que alguien ha hecho por ti? ¿Qué es lo más bonito que tú has hecho por alguien?

3. ¿Qué es más fácil, ser un niño o una niña? ¿Por qué?

4. ¿Cuál es tu primer recuerdo? Dime todo lo que puedas recordar.

5. ¿Qué es lo que más te gusta hacer en familia?

6. ¿Cuál es tu posesión más preciada? ¿Por qué es tan especial?

7. Cuando piensas en tu vida, ¿de qué es lo que estás más agradecido?

8. ¿Qué te hace feliz?

9. ¿Te acuerdas de tus sueños? ¿Puedes hablarme de uno?

10. ¿Si pudieras darle un regalo a una persona y no tuvieras que pagar para dárselo, a quién elegirías y qué regalo elegirías?

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