Sigrid Alegría y Alvaro Rudolphy se reencuentran como pareja de telenovelas

<P>Los actores volverán a estar juntos en <I>Separados</I>, la nueva apuesta nocturna de TVN.</P>




Sigrid Alegría lanza una carcajada y comienza a bromear con Alvaro Rudolphy. La actriz acaba de enterarse de que su compañero en Separados -la nueva teleserie nocturna de TVN que debuta en los próximos días-, afirmó, con cara de seriedad y antes de que ella llegara a la sesión de fotos, que él es menor que ella. "No le crean, no le crean, es un mentiroso", dice entre risas, mientras Rudolphy sonríe con cara de satisfacción. En realidad, él tiene 10 años más que ella.

La complicidad entre ambas figuras se nota en todo momento durante la sesión de fotos, en el hotel boutique The Aubrey, en Bellavista. Bromas, comentarios sobre los respectivos hijos y el cambio inesperado de la agenda de grabaciones para la próxima semana son algunos de los temas que salen a discusión. No es para menos. Ambos han estado apareciendo en teleseries juntos desde 1998, en el debut de ella con Borrón y cuenta nueva. Un año después hicieron de pareja, por primera vez, en Aquelarre, y desde ese momento se convirtieron en una de las duplas telenovelescas emblemáticas. La última vez que estuvieron juntos fue en ¿Dónde está Elisa?, en 2009.

"Ha sido súper fluido. Diría que incluso es más simple que las veces anteriores, porque esta vez sí que nos conocemos las mañas. Y nunca nos había tocado trabajar en comedia juntos. La cosa se acomodó rápido. Uno propone, el otro sigue, el otro propone y lo sigue", detalla Alegría y remata: "Mi compañero siempre es tan inseguro. Yo también, la verdad. Así nos vamos acomodando". Rudolphy, por su parte, complementa: "Para mí ha sido un agrado volver a trabajar con ella. Aparte de tener mucha simpatía en lo personal, en lo emocional y lo social, siento mucha empatía como actor. Es rico, porque ella es pura emoción y verdad, uno engancha fácil". Además, afirma, "hay una complicidad como podrían tener las parejas, porque hemos trabajado muchos años juntos".

Los años compartidos, reconocen, les han permitido acostumbrarse a las idiosincrasias de cada uno. "Sigrid llegaba un poquito tarde a las grabaciones y yo, como soy un tanto más neurótico, llegaba cinco minutos antes y a veces tenía que esperarla. Pero ya con los años me he ido relajando y ella se ha puesto más puntual", dice Rudolphy. Y su compañera coincide: "El es súper puntual y yo más relajada y se pone súper nervioso con eso. Pero ya no me reta cuando llego tarde", dice sonriendo, y añade que "es súper mateo, entonces llega con los libretos aprendidos a la pata. Soy un poco más chascona con los textos, entonces también me retaba y me decía que por algo estaban escritos así. Ahora ya me acepta". Además, Alegría también revela, bromeando, una particularidad de él: "Lo que más se repite es que, cuando revisamos la escena, a él no le gusta . Nunca le gusta como queda. Pero es parte del juego. Entonces nosotros le decimos que es súper buen actor, que la escena quedo linda y se va feliz a su casa", termina riendo.

"No es que uno chacotee mucho, pero sí hay una carga emocional y dramática que es bastante más liviana. No hay que adentrarse en las oscuridades de los personajes que me tocaron anteriormente, que era agotador. Además, tenía muchas escenas. Entonces, obviamente que era desgastador. En cambio, esta es más coral. El protagonista es Jorge (Zabaleta), por suerte", comenta Rudolphy sobre Separados, que marca su regreso a la comedia, luego de una seguidilla de personajes oscuros en producciones como Alguien te mira, Su nombre es Joaquín y La familia de al lado.

Infiel

En la nueva telenovela, el actor interpreta a uno de los personajes centrales, un cirujano que es patológicamente infiel a su esposa (Alegría), lo que finalmente, luego de mucho tiempo, termina por romper la relación. La tensión surge porque ambos siguen enamorados. El actor también ve con buenos ojos el cambio de temática en general: "Es mucho más atingente a uno, a la generación, a lo cotidiano de las relaciones de pareja. Sin entrar en la sociología del comportamiento de los separados en Chile, sino que tomándolo con humor".

Su compañera también reconoce que ha disfrutado la nueva tecla. "Tengo la mala costumbre de que se me quedan pegadas las energías, entonces llego a mi casa con un tinte del personaje. Es una pésima costumbre, no se la recomiendo a nadie. Entonces andar con la comedia pegada es agradable, teniendo dos guaguas en la casa", opina la actriz aunque, admite, "el drama me gusta, a la comedia le tengo un poco de susto".

La competencia

Ambos también coinciden en que el cambio es bienvenido, porque había un agotamiento en los temas oscuros. "La historia dice que abusamos un poco del thriller, de la oscuridad, pero por suerte el área dramática tiene la capacidad para poder tener un rango bastante amplio de producciones. En televisión, finalmente, uno tiene que ser súper intuitivo y ver por dónde va la mano", reconoce Rudolphy.

Mientras que sobre la competencia que enfrentarán con La sexóloga, la producción nocturna de Chilevisión que actualmente promedia 10 puntos de rating, Alegría afirma: "La teleserie de CHV es muy de 'ciencia ficción', muy ajena. Es una historia que yo creo que sí está divertida y bien hecha, pero se mantiene lejana. Eso le está jugando un poco en contra", opina y remata: "No podemos jugar a la bola de cristal, pero no parece ser un enemigo tan fuerte". Sobre la principal arma de Separados, hay consenso: es una historia que tendrá "identificación". "La gente empatiza más cuando más se identifica con los personajes. Cuando más reales son las historias. El problema que pudimos haber tenido con Vrolok y con Su nombre es Joaquín es que eran una cosa más atemporal y extemporánea", apunta Rudolphy.

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