TVN adelanta inicio de su teleserie, pero no consigue destronar a Mundos Opuestos

Dos medidas estratégicas: habían anunciado su estreno para las 22.30 horas, pero Reserva de familia partió a las 22.13, sorprendiendo a Canal 13 mientras daba noticias. Luego, TVN decidió dar dos capítulos seguidos, pese a que a la prensa mostraron ayer sólo un episodio. Las medidas, eso sí, no lograron desequilibrar el rating. Entre las 22.13 y las 23.25, el canal público promedió 18 puntos online -según cifras de la estación- y Tele13 y Mundos opuestos sumaron 25,5 unidades en ese mismo horario. La doña mantuvo los 13 puntos que viene marcando en las últimas semanas.

En su debut, Reserva de familia mostró la rivalidad de dos familias enfrentadas con el mundo del vino como telón de fondo, la muerte de uno de los patriarcas de la familia (Luis Alarcón), la pérdida de memoria del "villano" y algunas escenas de sexo.

"El rating era lo que esperábamos. Confiamos en la historia que tenemos y la gente se enganchó, lo que no es circunstancial", dijo anoche Luz Valdivieso.

"Este producto particular tiene un formato europeo de una hora y media por capítulo, donde se trabaja sobre la base de elipsis, que son cosas que no se ven en pantalla o que se recuerdan", cuenta Pablo Illanes, encargado de la adaptación local, quien agrega que se han creado un par de tramas para enriquecer al argumento y que sólo inventó un personaje (Tina Sánchez, la empleada de la familia Ruiz-Tagle).

El director de la apuesta, Patricio González, comenta que la principal diferencia en cuanto a contenidos radica en que los españoles tienen un carácter más "terrateniente" que los chilenos, por lo que se varió el contexto en que se desenvuelve la historia. De un pueblo chico en la versión española, el guión la trasladó a Santiago, al igual que se procuró bajar el énfasis en la pugna sobre el vino, ya que "se alejaba de la realidad chilena".

Las escenas más eróticas, recurrentes en las teleseries nocturnas, también son una de las características que, según González, diferencian a la versión chilena. "Son teleseries nocturnas, la gente ya está acostumbrada a ese estilo y no queremos traicionar eso tampoco", explica.

Difícil escenario

El debut de la producción aterrizó en el canal estatal en medio de un escenario complejo, dada la baja de sintonía que la señal experimenta en los últimos meses. En febrero, por ejemplo, se situó en el cuarto lugar de rating, con 5,3 unidades. Canal 13 lideró ese mes con 8,5 puntos, seguido por Chilevisión, con 7,5, y Mega, con 5,7.

Por eso, el estreno de la nueva producción dramática resulta tan estratégica. La opción por retrasar el estreno de la teleserie hasta ayer -en lugar de lanzarla con toda la nueva parrilla-, para posicionar los nuevos programas de la estación, como Factor X y Adopta un famoso, sólo surtió efecto la primera semana, cuando rondaron los 20 puntos. Pero en sus últimas emisiones no lograron hacerle daño al reality de Canal 13 y llegaron a los 11 puntos de rating.

La idea de acelerar el comienzo de la franja estelar no es una idea nueva dentro de la televisora. De hecho, al interior del departamento de producción es una opción que se ha propuesto en más de una ocasión, debido a que, como comenta una fuente del área, "es la única manera en que podríamos competir y comenzar a remontar. No sólo por Mundos opuestos, sino porque los programas salen muy tarde, a la hora en que baja el encendido", detalla.

En Canal 13, por su parte, además de exhibir la primera hora de Mundos opuestos sin comerciales, ahora comenzará a ir de lunes a viernes. Y aunque la red pública emite películas en ese día, el programa que Iván Arenas prepara como El Profesor Rossa está siendo preparado para ese horario.

Otro flanco complicado es el de su apuesta de los sábados. El espacio de concursos Divididos logró 9,6 y 9,2 puntos en sus dos primeros episodios y resultó cuarto en su horario. Por eso, su conductor, Alvaro Escobar, dice que ya están tomando medidas para mejorar el "ritmo y la familiarización del formato" para remontar las cifras.