Una empresa familiar

Pérsico era una firma familiar. Trabajaban en ella cinco miembros de la tercera generación: Dante, su hermano Pablo -quien murió en mayo-, sus primos Mario, Claudio y Alejandro Pérsico Paris. Y también cuatro integrantes de la cuarta generación.

Un primo era el gerente de servicio técnico de Peugeot; el cuñado, gerente de servicio técnico general; una hija, diseñadora, de Dante, era la decoradora de los locales; un hijo, subgerente de administración. Una sobrina era vendedora, otra estaba en el área de calidad. Había dos gerencias de ventas: una general y otra de autos usados que ocupaban dos primos. "Todos tenían sueldos de mercado y cumplían una función. No creo que haya sido perjudicial".

Los estudios dicen que sólo el 16% de las empresas familiares supera los 50 años en Chile. Y que para evitar la desaparición es clave contar con un directorio profesional que Pérsico Hermanos no tenía.