Zegers y Tagle suben al teatro sosteniendo una familia disfuncional

<P>Dirigidos por Omar Morán, los actores encarnan a un matrimonio de relaciones viciadas desde el 9 de abril en Mori Bellavista.</P>




En el patio trasero de una casa chilena, junto a un lavadero muy chileno, se juega la metáfora de la versión local de Los padres terribles del francés Jean Cocteau:"la ropa sucia se lava en casa". Refrán que habla del interés del director Omar Morán (Barrio Alto: Acasusso) por acercar textos de autores importantes a la identidad nacional -acción que ya hizo en 2013 con El reformador del mundo- y que también abarca los problemas que pueden generarse al interior de una familia al intentar frenar, tapar o apresurar relaciones que ya están viciadas. Tal como ocurre con Jorge e Ivonne -Marcial Tagle y Antonia Zegers - en el montaje que se estrena en el Teatro Mori Bellavista el 9 de abril. Son dos personajes torcidos.

"Mi personaje", explica Tagle,"tiene alrededor de 50 años y tiene un hijo de 22. Está casado con una mujer muy dominante y vivimos con su hermana, que fue novia mía. Y mi hijo tiene su primera polola que, al poco andar, se revela que es amante mía, y con mi cuñada vamos urdiendo planes para sostener o no la mentira".

"Son puros límites confusos. Es una apología de amores que se pasan a lugares insanos. Claro, el amor siempre es muy bien evaluado como un sentimiento bello, pero puede ser horroroso", agrega Antonia Zegers sobre la pieza de noventa minutos y cuya música está a cargo de Gepe, quien preparó un cover de Joe Dassin - Y si tu no has de volver- para esta historia que persigue cuestionar la idea de "familia moderna". Un retrato de las añoranzas y las frustraciones de los padres hacia sus hijos y del miedo a envejecer, o el miedo del éxodo de los hijos del hogar. Cuestión que se profundiza cuando se trata de un único hijo como Michel, interpretado por Armin Felmer. "No sólo la madre se rayó con el hijo. El hijo también. E lo menciona: 'Yo cuando chico me quería casar con mi mamá.Yo pensaba que algún día la iba a pasar de edad, y mi papá me decía que no'", enfatiza Zegers.

Leo y Madelaine, Taira Court y Daniela Castillo respectivamente, cierran este elenco con cual Morán ha ensayado desde noviembre. En sus palabras: "La obra circula en torno al amor familiar, y por amor, se cometen los vicios, los excesos. La obra está como construida en nombre del amor. Para mí el tema principal de la obra es cómo la relación familiar puede convertirse en un vicio".

Morán, al recordar el trabajo actoral que se ha realizado de este texto de 1938 de Cocteau, cuenta que muchas personas piensan que se trata de una obra más bien melodramática. Lo que inmediatamente rechaza: "Es una comedia negrísima, donde el público se va a reír muchas veces porque tiene guiños de comedia negra evidentes, y eso genera mucha atracción. Es un drama muy irónico. Es más una comedia inteligente, no te ríes del chiste pero lo haces de algo mucho más profundo: te ves en él, por eso te vas a reír. Yo lo definiría como una comedia irónica. Un drama negro".

"Es irrisorio la forma y el trato de lo que sucede. Con mucha grosería, maltrato, portazos. Muestra la vulgaridad propia de nuestra sociedad, de un Chile de este siglo, hay una transposición a la sociedad chilena como si fuésemos seres que nos movemos en el suelo si habláramos de niveles. Andamos arrastrados. Es muy paradójico lo que plantea. Es políticamente incorrecta.¡Un padre que debería darlo todo por un hijo, pero acá está con la polola!", plantea Tagle sobre el trabajo del sarcasmo en Los padres terribles. "Raya en el melodrama, con un humor muy sarcástico, muy cruel", dice Zegers", en realidad el exceso de realidad se pasa a lo grotesco. Y yo diría que a esta obra, le pasa esto".

Los padres terribles se estrena el sábado 9 de abril en Mori Bellavista.

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