Si se trata de la Bundesliga, Bayern Múnich es la gran carta para quedarse con el trofeo del torneo alemán, un plato tipo escudo de gladiador que se lleva el primer lugar. En cada jornada, demostraba ante sus rivales su inmensa superioridad. Demostraba.

Ayer, en la apertura de la undécima jornada, falló. En su visita al Eintracht Frankfurt, sólo empató 0-0, con Arturo Vidal en cancha los 90 minutos. Se mantiene como líder, pero se terminó su gran racha de victorias en el arranque del certamen. La marca llegó hasta las 10. 

El Bayern fue amo y señor de las acciones. No tuvo contrapeso, ya que su rival prefirió agruparse atrás y defender. Durante el primer tiempo, el conjunto muniqués se apoderó del balón sin embargo no pudo vulnerar el arco de su contrincante, que por momentos defendió con los 11 jugadores en su campo. La primera chance de gol fue de Arturo Vidal, en los 11', con un cabezazo que despejó el arquero Lucas Hradecky. Luego, en los 30', otro cabezazo, esta vez del español Javi Martínez, pasó muy cerca de la portería contraria.

En el complemento, Bayern de entrada tuvo una opción para anotar, mediante Douglas Costa, tras un error defensivo del Eintracht Frankfurt, pero desvió. Ante la premura del resultado y el hecho de que no podían entrar al área, Guardiola sacó a Rafinha y puso a Thomas Muller. Este cambio implicó que Philipp Lahm, quien jugaba su partido 450 en el club, pasara al lateral izquierdo (por Rafinha) y Arturo Vidal se ubicara como lateral derecho, pasando al ataque cada vez que el Bayern se adentrara en terreno contrario.

Una y otra vez atacaban los bávaros, buscando la anhelada apertura del marcador, sin embargo chocaban una y otra vez con una muralla de camisetas negras. Eintracht Frankfurt tuvo alguna ocasión para anotar, y sorprender, pero tampoco fueron capaces de batir a Manuel Neuer. Con poca fineza en los metros finales, el empate se consolidaba. Frankfurt aguantaba como podía, hasta que el pitazo final los alivió.

Pudo ser el undécimo triunfo consecutivo en 11 fechas del campeonato para los bávaros, una marca que traspasaba lo local si se concretaba, ya que igualaban el récord, en las cinco grandes ligas europeas, que hizo Tottenham Hotspur, en la temporada 1960-1961.

Ahora, el foco para los muniqueses cambia. Este miércoles, reciben al Arsenal por la cuarta jornada de la Champions.