El gobierno colombiano afirmó hoy que la filtración de un video que muestra intimidades de la operación que permitió el rescate de la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y otros 14 rehenes que estaban en manos de la guerrilla de las FARC puede configurar el delito de traición a la patria.

El documento fue revelado ayer por el canal de televisión RCN y muestra los preparativos de la denominada "Operación Jaque", realizada el pasado 2 de julio en un sector selvático del sureste del país, así como los primeros instantes de la liberación de los secuestrados.

El rescate fue realizado por un comando de élite del Ejército, cuyos miembros engañaron a los rebeldes fingiendo ser periodistas e integrantes de un organismo internacional humanitario que trasladaría a los rehenes a otro campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Dos semanas después del rescate, el Presidente Alvaro Uribe pidió disculpas al CICR tras admitir que uno de los oficiales había portado un peto con los emblemas de ese organismo, aunque dijo que lo hizo porque sintió temor al ver a un elevado número de guerrilleros cuando llegó al punto del encuentro con los secuestrados.

Sin embargo, la revelación del video dejó en mal pie al Mandatario, pues se constató que el militar tenía puesto el peto desde antes de que los dos helicópteros partieran para la última fase de la operación. Todos los miembros del comando posaron incluso para fotos.

El ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, afirmó que la filtración a la prensa es "un acto desleal" detrás del cual puede estar el delito de traición a la patria, pues se puso en peligro la vida de los miembros del comando de élite.

Santos sostuvo que no censura al canal de televisión, del que dijo que "está en todo su derecho" de conseguir una noticia, sino a las personas que entregaron el material, posiblemente por lucro.

"Esto no debe empañar los resultados de una operación que le dio la vuelta al mundo y seguimos celebrando. Los rehenes estaban siendo torturados, ustedes vieron las cadenas que tenían puestas, y hoy están gozando de su libertad", dijo el ministro.

Según el funcionario, una investigación interna en el Ministerio de Defensa determinará responsabilidades en este caso, tras afirmar que ya hay indicios sobre los culpables de la filtración.

La divulgación del video completo reveló que, además de los emblemas del CICR y el logotipo del canal multinacional de televisión Telesur, cuya sede central está en Venezuela, los militares que se hicieron pasar por periodistas llevaban en sus chalecos un distintivo del canal ecuatoriano Ecuavisa.

Antes de que Santos dijera que los implicados pudieron haber cometido el delito de traición a la patria, el gobierno había reaccionado con malestar por la filtración y la confirmación de que el militar que usó el emblema del CICR no lo hizo por temor en el momento mismo del rescate, sino que se trataba de una acción premeditada.

"El Presidente reitera la necesidad de permitir que todos los medios de comunicación tengan igual y oportuno acceso a las noticias más importantes. Es grave que integrantes de las Fuerzas Armadas filtren noticias de manera clandestina y sin coordinación con sus superiores. Además, es grave que en las primeras investigaciones sobre la Operación no haya salido a relucir toda la verdad", señala un lacónico comunicado expedido hoy.

El material divulgado por la televisión muestra la forma en que los mismos militares que rescataron a los rehenes pintaron dos helicópteros del Ejército con colores blanco y anaranjado y diseñaron un emblema de una supuesta organización humanitaria.

Además, permite observar algunos detalles de los entrenamientos para reducir a los dos guerrilleros que subieron a uno de los helicópteros junto con los secuestrados, alias "César" y "Gafas", quienes fueron hechos prisioneros mientras los militares informaban a los rehenes que estaban libres.