Facebook lanzó una nueva función que requiere que las aplicaciones y sitios web externos informen a los usuarios exactamente a qué partes de su perfil tienen acceso para operar.

Las aplicaciones ya tenían que pedir autorización a los usuarios para tener acceso a datos de su perfil que no son públicos. Pero no tenían que especificar qué información usarían.

Dicha información puede incluir fotos, fechas de nacimiento o direcciones de correo electrónico.

La red social anunció este cambio el abril y es parte de la cooperación de Facebook con el comisionado de privacidad de Canadá, quien ha sido uno de los mayores críticos de las políticas de la compañía sobre protección de la información personal de los usuarios.