Después de ejercer de investigador durante cuatro años en Teherán, Karim Sadjadpour se trasladó a Washington para incorporarse al think tank Carnegie Endowment. Considerado uno de los prestigiosos expertos iraníes, es un colaborador habitual de medios internacionales como la CNN o la BBC.

¿Cómo definiría a Hassan Rohani?

Es un clérigo moderado, del círculo del ex Presidente Hashemi Rafsanjani. Creo que las expectativas que ha desatado su victoria son demasiado altas. Hay que tener en cuenta que el hecho que sea considerado el único "reformista" en las elecciones es un reflejo del viraje de la política iraní hacia la derecha. Hace una década, muchos de los reformistas que dominaron las instituciones electas, sobre todo la presidencia y el Parlamento, habrían considerado a Rohani un rival más que un aliado.

¿En qué afectarán estas elecciones la trayectoria del régimen iraní?

Tendrán un impacto directo en la vida de los iraníes. Es cierto que las principales atribuciones de poder en la Constitución recaen sobre el líder supremo, Alí Jamenei. Ahora bien, el presidente desempeña un rol importante en el manejo de la economía del país, en la esfera doméstica, así como en su imagen a nivel internacional. Además, es importante recordar que durante los ocho años de gobierno reformista, con Jatami, había un clima de mayor tolerancia política y social en comparación con el mandato de Ahmadinejad. Si Jamenei, que ya tiene 73 años, muere bajo su mandato, el presidente podría influir en la elección de su sucesor.

Concretamente, en política exterior, ¿Qué cambios se pueden esperar?

En Irán, la política exterior no está controlada por el ministerio de Asuntos Exteriores, sino por los Guardianes de la Revolución, que rinden cuentas directamente al líder supremo y no al presidente. Durante la campaña, ningún candidato cuestionó esta distribución de papeles. Por lo tanto, aunque la victoria de un reformista no es una buena noticia para Bashar Assad, no cabe esperar, por ejemplo, que Irán rectifique su apoyo al régimen sirio. No obstante, los presidentes sí tienen un impacto en cómo el país se percibe fuera, son la cara pública del país, y no hay duda que las declaraciones de Ahmadinejad facilitaron el aislamiento de Irán. Para Israel ahora será más difícil aislar a Irán.

¿Lo mismo vale para la cuestión nuclear?

Sí, es una área reservada a los Guardianes de la Revolución y a Jamenei. En la campaña, varios candidatos criticaron la ineptitud del negociador iraní.

¿Cree que el resultado es una derrota para el ayatolá Jamenei?

No estoy seguro que sea el perdedor de estas elecciones. Los votantes han rechazado sus políticas, pero el hecho de que él haya permitido unas elecciones limpias puede rehabilitar su dañada imagen.