Los estrenos extranjeros que se toman la TV

La costurera más bonita y sencilla de Madrid se convierte en una elegante modista en Tetuán, al norte de Marruecos, y luego conquista su España natal. Entre medio, hace de espía para los británicos en plena Segunda Guerra Mundial, mientras los nazis, lejos del campo de batalla, se preocupan de llenar copas de champaña, conspirar y vestir bien a sus mujeres. Todo esto, con actores hermosos, paisajes de ensueño y unos vestidos de maravilla. La serie El tiempo entre costuras, basada en el best-seller de María Dueñas, se convirtió en un éxito arrasador en España, con cinco millones de espectadores aproximados en cada uno de los once capítulos (en el mercado internacional, se divide en 17 episodios). En Chile, la serie está disponible en Netflix hace unos meses -y en el mundo pirata, más todavía-, pero es una de las grandes novedades del verano en TVN, que la estrenará esta noche a las 22:05 y luego la exhibirá martes y miércoles a las 22:50 horas.

Aunque los éxitos de la televisión española no siempre se traducen a la pantalla nacional -como fue el caso de El príncipe, en Canal 13- y El tiempo entre costuras tiene un ritmo pausado de narración, que para algunos se puede hacer muy largo, la producción original de Boomerang y Antena 3 es una épica que recuerda a las grandes películas de matiné. Además, mezcla hechos y personajes históricos reales con los de ficción.

La historia es la de Sira Quiroga (Adriana Ugarte), quien desde niña trabaja como costurera con su madre, en un elegante taller de Madrid. Sira, en vez de casarse con un hombre bueno y enamorado, se termina yendo a Marruecos con un galán -rídiculamente- guapo (Rubén Cortada), a gastarse una fortuna recién heredada. Como a tantas mujeres les ha pasado antes que a ella, la cosa no termina bien, y mientras su país se divide en dos bandos para la guerra civil, ella debe rearmarse en África. Eventualmente, se convertirá en una hábil espía durante la Segunda Guerra Mundial. Con un vestido y un peinado para cada día.

TELESERIES TURCAS Y COLOMBIANAS

La pantalla veraniega no sólo se renueva con acento español a partir de hoy, varias teleseries llegan a la televisión este súper lunes extranjero.

En Canal 13, a las 19:45 horas, comenzará la nueva apuesta turca de la señal de Luksic -que ya tiene El sultán y Amor Prohibido, del mismo país-: Kuzey Güney. Este es un melodrama (inspirado en la serie norteamericana Hombre rico, hombre pobre de los años 70), con dos hermanos que son contrarios: está el rebelde y espontáneo y el calmado y paciente. Por supuesto, están enamorados de la misma mujer, Cemre, quien opta por Güney (lo cual no es tan lógico, ya que Kuzey es interpretado por el "Brad Pitt turco", K?vanç Tatl?tu?). Tras estar en un accidente en el que muere un hombre, Kuney acepta tomar la culpa de su hermano y va a la cárcel. Tras cuatro años, tratará de retomar su vida.

Canal 13 no sólo busca mejor suerte que con sus turcas ya estrenadas, que no han tenido el mismo éxito de audiencia o repercusión que las de Mega, sino que también llenará el espacio de la teleserie vespertina, tras el fracaso de Valió la pena.

El otro canal nacional que tendrá una teleserie internacional a las 20 horas, horario históricamente reservado para lo chileno, es TVN, que -tras los malos resultados de Caleta del sol- estrena hoy la colombiana Los hombres también lloran. Esta producción tiene tono de comedia, y cuenta la historia de Javier, un doctor que tras perder su trabajo, es abandonado por su mujer y debe comenzar de nuevo; mostrará que tanto el protagonista como otros personajes masculinos, sufren por amor. La producción de Caracol está basada en la película argentina-española No sos vos, soy yo.

Por último, Chilevisión tiene dos estrenos hoy. A las 18:45 comienza su exhbición de Caso Cerrado, el exitoso tribunal de Ana María Polo (antes exhibido por Mega). Y la señal de Time Warner estrena también hoy su apuesta turca: la teleserie Tormenta de pasiones, que irá lunes, martes y miércoles a las 22:30 horas. Es una historia de época, ambientada en los años 60, con una mujer fuerte de protagonista: Camile, la matriarca de una familia con cuatro hijos, cuyo esposo es un capitán de barco que viaja constantemente. Y, aunque no tiene una mujer en cada puerto, como dice el dicho, sí tiene una relación paralela con una holandesa. La nueva mujer llegará a Turquía y desencadenará una serie de tragedias que desintegrarán a la familia. Cuchillos, cárcel, perder casas, incendios, ahogos y más. A la turca.