Llega a su casa-taller en Las Condes cargada de bolsas. Entra casi corriendo, pregunta por su hija que está en el segundo piso durmiendo, durante el fin de semana participó de una feria de diseño donde quedó sin stock y, si bien, es una buena noticia es sinónimo de no tener material para abrir su nueva tienda en el Parque Arauco, donde tiene por socia a Aurora Conejero. Se trata de Karyn Coo, la diseñadora chilena que estos días es un torbellino imparable.

Con 26 años, tiene claro lo que es romper las reglas. Tras estudiar en el Villa María, entró a estudiar diseño, pero lo dejó porque se enamoró y fue a vivir a Argentina con su marido, Andrés. Se dio la oportunidad de participar en la primera temporada de Project Runway Latinoamérica y destacó de inmediato, coronándose como la primera chilena en ganar el conocido reality de moda. Vuelve a vivir a Chile, abre su tienda, quedó embarazada, decidió cerrarla para abocarse en la alta costura y vestidos de novias. Sin embargo no pasan más de seis meses antes de que cayera en la tentación de volver a tener una tienda, nació su hija Filippa, le ofrecen su primera colección de la mano de un retail, con su hija como inspiración idea una línea para niños: Petit. Los últimos cuatro años en la vida de Karyn tienen sólo un sinónimo y que los describe claramente: intensos.

¿Qué significó Project Runway?

Un sueño hecho realidad. Desde el momento en que una postula y entra, es todo muy mágico. El ser consciente de lo que significó vino después de mucho tiempo. Hoy  digo qué increíble la suerte que tuve de poder estar ahí, conocer a esas personas. Se me abrió un mundo de oportunidades, contactos, de saber cómo es ser un diseñador sin tiempo, trabajar bajo presión, con proyectos más grandes  y fue increíble.

En los últimos cuatro años fuiste mamá, ganaste Project Runway, lanzaste tu línea, te viniste a Chile. ¿Cómo fue este proceso?

Súper intenso, pero yo soy así, una persona intensa. Me gusta estar siempre corriendo, sin tiempo, estresada, tomar muchos proyectos. De hecho,  nació Filippa y ahí decidí bajar un poco el ritmo laboral. Cerré la tienda, pero a los seis meses volví a abrir otra. Entonces, me cuesta quedarme sentada sin mucho qué hacer. Soy una persona súper activa con mucha energía.

¿Cómo cambió tu rutina Filippa?

Filippa es mi motor. Todo lo que hago trato de hacerlo con ella para poder tener un tiempo juntas. Es una niñita que está creciendo en un ambiente de moda, diseño, fantasía, pedrería, brillo, novias, sedas y es el entorno en que me hubiera encantado haber nacido y que no tuve.

Ella fue clave para que decidieras entrar al mercado infantil

Cuando me quedé esperando guagua fue un shock para mí y mi marido. Te hace replantear todo. Aparecen miedos de cómo lo vamos a hacer porque no tenemos un horario muy estable, como somos los dos independientes. En verdad hay que madurar. Es como despabilar con una cachetada, pero salió todo súper bien. Ha  sido una experiencia increíble ser mamá. Es algo que jamás imaginé que sería tan espectacular y lo estoy viviendo, gozando y sin dejar de lado mi trabajo, que es una de las cosas que también amo. Hay muchas cosas que uno gustaría tener al mismo tiempo.

De todas tus facetas en el mundo de la moda. Está Petit, la línea en el retail, alta costura y novias. ¿Con cuál te quedas?

¡Con todo! Petit es mi proyecto más reciente. Siento que tengo tres hijos: novias que es mi hija más grande. Después está Prêt-à-porter  que es la del medio y Petit que es el más chiquito, nació hace un año. Mucha gente me decía ‘Karyn estás metiendo una cosa más encima, un cacho más, estás perdiendo tiempo, plata, ¿por qué no te quedas con las novias y la tienda?.  Yo respondía porque Petit va a funcionar, estoy segura. Nadie me daba un peso y se ha vendido súper bien. Los diseños están buenísimos. Petit tiene esa esencia mía súper marcada que es esta parte vintage, más antigua,  de lino, más orgánico que me encanta. Le tengo demasiado cariño y en el retail ha funcionado súper.

Ahora los niños tiene mercado en el mundo de la moda

Claro. Es que eso también es un impulso para decir: ‘sabes, los niños también se pueden vestir bacán, también hay un mercado de niños que está creciendo afuera, por qué acá no. Creo que se ha abierto esa ventana al mundo infantil.

¿Cuál es el  sello de tus creaciones?

Creo que cada una de mis cosas tiene una impronta súper marcada que es una mezcla de lo urbano con lo más sofisticado. Me gusta mucho meter cortes de textiles diferentes. Me gustan mucho las cosas metalizadas, sobre todo el dorado. Mi sello es mezclar textiles naturales, súper nobles. Muchas veces orgánicos con colores más beige, nude con esta onda más rockera, más de noche.

¿Qué visión tienes del diseño nacional?

Creo que el vestuario en Chile está creciendo un montón, están saliendo diseñadores con mucho potencial. Hay mercado para todo, sobre todo en las novias. Es increíble cómo la cantidad de gente que está haciendo alta costura. Hay harto diseñador, pero hay harto consumidor, entonces no nos chocamos.

¿Qué importancia tiene la innovación en este proceso?

Creo que es un pilar súper importante porque es muy fácil quedarse pegado y decir es que éste es mi estilo. El tema del estilo está súper cuestionado porque por más que sea un estilo, hay que hacer cosas nuevas.

¿Cómo innovas?

Para este verano, por ejemplo, me metí con más color. Para el invierno estaremos con estampados, que yo normalmente soy cero estampado. Mis cosas son súper planes, bien orgánicas. Entonces hay que tratar de hacer cosas nuevas, diferentes porque de repente van saliendo súper bien y no sabes de esa veta y creo que es importante  estar experimentando, porque es la forma en diferenciarse y captar nueva clientela.

Me interesa estar creciendo y que las niñitas más pequeñas conozcan la línea y que mis Petit crezcan conmigo. Ojalá que cuando tengan 25 años sigan familiarizadas con la marca.

¿De dónde viene tu inspiración?

Mi inspiración viene de muchos lados. Sin embargo hay dos tendencias fuertes. Una es el tipo de mujer a la que yo creo. Tienen una edad determinada, estilo de vida específico, la tengo súper clara y se me  hace súper fácil porque yo estoy en esa misma etapa. Entonces  pienso en mí también, qué tengo ganas de ponerme, qué quiero usar esta temporada,  ese es un poco mi motor. Aparte está la inspiración más temática para crear y dibujar para sacar líneas en base a eso.

Tienes una alianza con París, ¿qué tan importante ha sido  que el retail de alguna manera apoye tu carrera?

He tenido una muy buena experiencia. Ellos siempre han estado abiertos a mis creaciones y propuestas. El retail también me ha ayudado a dar a conocer la marca, pero  a la vez tiene un doble filo. De repente una quiere seguir siendo más chiquitita, algo no tan masivo. Entonces,  por eso son dos colecciones totalmente diferentes que están pensadas para retail.  Pero, de verdad, me siento en mi casa cada vez que tenemos reuniones.

¿Cuáles son tus proyecciones pensando en el próximo año?

Antes que nada, mis pensamientos están centrados en la próxima semana que abriremos la tienda con Aurora Conejero en Parque Arauco. Para  nosotras es un salto súper importante porque se trata de un mall al que cuesta mucho entrar,  nos dio la opción de un local afuera y ver cómo funciona. Estamos expectantes de cómo va a ser la llegada de nuestros productos a la gente. Si sale todo bien, deberíamos abrir el lunes.

¿Qué otras metas ves en el corto plazo? 

Tengo muchas ganas de llegar a regiones. Ése es nuestro propósito para 2015. Se habla de una alianza con EEUU para ver si sale algo, pero todavía no hay nada muy concreto. Pudimos lanzar este año la web que nos ayudó mucho para ver qué tanto está saliendo nuestro producto a otros lugares. Nos dimos cuenta que sí necesitamos expandirnos fuera de Santiago. Después  de ese paso tenemos que ver para dónde queremos salir a nivel sudamericano.

¿Quiénes son tus referentes en la industria?

Tengo muchos. Como hago diferentes líneas, tengo referentes de todos los estilos. Pero  sigo hace a un montón de tiempo a diseñadores como Karl Lagerfeld, Tom Ford, las chicas de Rodarte me encantan, Mariano Toledo que es un diseñador argentino y que tuve el honor de conocerlo en Project Runway, de hecho,  postulé a Project para poder conocerlo. Carolina Herrera, Yohji Yamamoto son algunos. También tengo referentes de estilos como fashiontoast. Es que al final, por la globalización nos ha llevado a tener referentes no sólo de moda, sino que de estilos de vida.

¿Quiénes están haciendo un buen trabajo en Chile?

Vi el último trabajo de Matías Hernán que me encantó. Su propuesta es súper innovadora,  fresca, con mucho color, muy moderna que creo es una moda que se puede ir para afuera de todas maneras.

¿De qué es sinónimo Karyn Coo?

Es sinónimo de varias cosas, pero lo que trato de proyectar en cuanto  a mis diseños es frescura, que se pueden usar día a día, con un toque glam.