SEÑOR DIRECTOR:

Tras varios meses, la Comisión de Educación del Senado está cerca de terminar de discutir el proyecto de ley sobre convivencia escolar. A pesar de ser un tema de la mayor relevancia para el sistema educativo, se trata de una iniciativa que probablemente no cumplirá las expectativas.

Desde su presentación, diversos actores han advertido sobre la importancia de contar con financiamiento para contratar profesionales capacitados para enfrentar este desafío, sin embargo, el proyecto no contempla ningún recurso adicional para este fin. Por otro lado, se ha preferido abordar la convivencia escolar desde una mirada excesivamente normativa e inflexible, limitando la posibilidad de soluciones diversas. Por último, pero no menos importante, el proyecto aumenta la carga administrativa, alejando a docentes y directivos de su principal función: educar.

Lamentablemente, el proyecto amenaza con convertirse en una herramienta ineficaz ante un problema grave y urgente. Una vez más, es posible que se sume al largo listado de normativa educacional otra ley que no cumpla con sus objetivos.

Constanza Lara

Directora Legal en Acción Educar