La acusación de que soy insolvente no solo es falsa, malintencionada, insidiosa: es también un disparate. Porque nunca le he pedido plata prestada a nadie. Nunca, a nadie. Cuando no podía comprar, alquilaba y ahorraba y después compraba. Nunca le he debido un centavo a ningún banco. Al contrario, he sido prestamista, acreedor, y me han estafado varias veces por creer cándidamente, como todo un bobo, en quienes me pedían dinero.
8 jul 2023 10:00 PM