La competencia a nivel de la clase dirigente por mostrar indignación y odio contra los malhechores no sirve para nada. Eso deberían dejárselo a los matinales. La gracia de las élites eficaces es su alta racionalidad, realismo y capacidad de trabajo y articulación mezclada con cierto nivel de falta de escrúpulos al momento de defender el orden público.
15 mar 2025 07:24 PM