Review | Live a Live: Un RPG que no te puedes perder

Con una serie de historias independientes, este juego cautiva de principio a fin con su jugabilidad y desarrollo.


2022 ha sido un gran año para los JRPG con una gran cantidad de lanzamientos, entre estos se encuentran títulos completamente nuevos, así como regresos a través de remake y remasters de títulos de antaño. Entre estos últimos es que se encuentra Live a Live un JRPG lanzado originalmente para Super Nintendo en 1994 por parte de Squaresoft, y que ahora tuvo un remake de la mano de la Nintendo Switch.

Esta nueva versión que utiliza el estilo gráfico HD-2D de Square Enix, que comenzó con Octopath Traveler y ya se ha traspasado a diferentes juegos del género, por lo que cuenta con un aspecto que llama la atención desde un comienzo, utilizando sprites que recuerdan la época clásica de los JRPG con escenarios en 3D, en un contraste que cautiva y se ha convertido en una de las mejores formas de traer al presente juegos clásicos.

En el caso de Live a Live la historia no es diferente, y nos encontramos con un juego que le saca el máximo provecho a estos gráficos, dado que el juego se encuentra dividido de tal forma que nos hace recorrer diferentes escenarios, desde el viejo oeste, al japón feudal, el presente y el futuro, por lo que todos estos escenarios se logran destacar al máximo con este estilo visual.

Pero vamos a Live a Live, el juego más que una gran narración, nos presenta capítulos con diferentes historias independientes, y que se desarrollan en diferentes épocas, cada una con sus propios protagonistas e trama. Es así como nos encontramos con capítulos basados en la prehistoria, la China Imperial, el Japón Feudal, el Viejo Oeste, el presente, el futuro cercano, y el futuro lejano.

Aunque cada una de las diferentes historias tiene un desarrollo independiente, con sus propios protagonistas, una vez culminado los diferentes episodios es que se obtiene un capítulo extra basado en el medioevo, y tras terminarlo es que se da acceso a un capítulo final en donde se unifican todas las historias.

El hecho de pasar gran parte del juego con historias completamente separadas tiene sus puntos a favor y en contra, por un lado nos encontramos con tramas que se desarrollan de forma rápida y que no se dan muchas vueltas para lograr sus objetivos, pero a la vez, hace que cada historia, y la trama de cada personaje no sea profundizada, teniendo nada más que una pincelada de las motivaciones de cada uno de nuestros protagonistas, y no una historia completamente desarrollada como uno esperaría.

Hay que mencionar que cada historia se extiende por entre una y dos horas, por lo que se si se suman los diferentes capítulos se tiene un tiempo de juego considerable, pero que de todas formas no nos mantendrá pegados por incontables horas como otros JRPG.

Entre los elementos que destacan de este juego sin duda se encuentra su jugabilidad, ya que cada una de las historias cuenta con sus propias mecánicas únicas, lo que otorga una jugabilidad única cada vez que comenzamos una nueva historia, y aunque el sistema de combate, que toma elementos de los juegos tácticos, con un tablero por el cual nos podemos desplazar, se mantiene, las mecánicas al momento de explorar el mundo son completamente diferentes.

Es así como por ejemplo con Pogo, el cavernícola protagonista del capítulo de la prehistoria puede olfatear para detectar monstruos a los cuales enfrentar o comida. Este capítulo de igual forma se destaca por no contar con diálogos y basarse netamente en las señas y emociones del protagonista. Por otro lado, en el Japón Feudal, es que tomaremos el control de un ninja llamado Oboromaru, el cual tiene la habilidad de ocultarse, y podemos desarrollar la misión utilizando el sigilo o asesinado con las diferentes personas que encontramos. Todo esto otorga una jugabilidad más que atractiva, dado que cada historia tiene su propia magia, y aunque hay que avanzar bastante para poder conectar a las diferentes historias cada uno de los capítulos resulta atractivo en sí mismo.

Live a Live es un RPG que sale de lo común, y dado que en su lanzamiento original nunca salió de Japón, esta se vuelve una excelente oportunidad para probarlo, sobre todo si es que disfrutas de los JRPG de la época de Super Nintendo, y es que aunque el juego cuenta con el estilo visual HD-2D que lo trae al presente, y una serie de mejoras, el desarrollo y el cómo están contadas sus historias se notan que pertenecen a aquella época, haciendo que el juego nos transporte al pasado a aquellas tardes de juego frente al televisor.

Otro de los aspectos que hay que destacar de este juego es su banda sonora, la cual en esta ocasión llega de la mano del compositor Yoko Shimomura, y que se adapta de forma perfecta a cada uno de los momentos, historias y protagonistas que presenta Live a Live, con pistas que se adaptan de excelente forma a la época en la que estemos jugando.

En conclusión…

Live a Live deja Japón y da su salto al mundo con una versión que cautiva de un comienzo a un final. Sus gráficos, su música, así como sus diferentes historias resultan llamativas con protagonistas diversos y una jugabilidad con giros para cada uno de los capítulos. Su estructura por capítulos independientes se siente bastante atractiva, y recuerda un poco a como se encuentra realizado Octopath Traveler.

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