La última vez que Amaia Montero se presentó en Chile fue en junio de 2009. Con un concierto en Movistar Arena, como parte de la gira promocional de su disco homónimo, la española presentaba por primera vez ante el público chileno su nueva fase en solitario, luego de más de una década al mando del grupo La Oreja de Van Gogh. Ahora la cantante prepara su regreso al país, con una gira que en octubre pasará por Viña del Mar, Santiago y Concepción, y en la que según adelanta, mostrará sobre el escenario los resultados de su evolución artística. Tras casi diez años fuera del grupo con el que ganó el reconocimiento internacional, la intérprete se siente más madura y empoderada de su rol de solista.

"Empecé hace casi 8 años y ahora esta carrera está más sólida que nunca. Ha sido una etapa muy importante en mi vida, una experiencia nueva, y con este tercer paso ya me he sentido mucho más segura", resume la artista a propósito de Si dios quiere yo también, su tercer álbum en solitario, lanzado el año pasado y del que se desprenden sencillos como Palabras y Darte mi vida. Un trabajo con una decena de nuevas canciones compuestas por la propia cantante, a las que a su tradicional estilo vocal sumó nuevas sonoridades, trabajo en el que participó el productor sueco Martin Terefe (Jesse & Joy, Miguel Bosé y James Blunt).

“En este disco ya pude echar a andar mis ideas y me sentí más cómoda también, con un sonido distinto, más inglés. Hay una evolución grande la verdad”, asegura Montero sobre el álbum que salió al mercado luego de una pausa musical de tres años -tras la publicación de Amaia Montero 2, en 2011- y que al momento de  su lanzamiento se posicionó en el primer lugar de ventas digitales en doce países, incluyendo España, México y Chile, donde la cantante conserva una fanaticada incondicional.

“Chile tiene un lugar grande en mi corazón. Es un país al que le tengo muchísimo cariño y muy buenos recuerdos, en especial, de los conciertos en Santiago, en Viña del Mar y también de Pucón, que tuve tiempo de conocer en medio de una gira y me enamoró”, cuenta la artista, quien con los años ha ido desarrollando una cierta cercanía con uno de los compatriotas que triunfa en su país: el capitán de la selección chilena Claudio Bravo, a quien conoció cuando éste atajaba para el equipo de sus amores, el Real Sociedad.

“Claudio es un amigo, un tipo maravilloso. Es un crack y de hecho la última vez que hablamos le dije que iban a ganar la Copa América”, detalla.

Apego especial

Sobre este nuevo tour por el país, Montero adelanta un repertorio que incluye todas sus etapas: desde las canciones de su último trabajo y de los dos discos anteriores, hasta los diversos éxitos de su época junto a La Oreja de Van Gogh, una de las bandas más exitosas del pop español del siglo XXI, y el conjunto con el que triunfó dos veces en el Festival de Viña del Mar.

Además, de los recuerdos de sus pasos por la Quinta Vergara, donde en 2005 y 2006 se llevaron todos los trofeos posibles y el premio a los artistas más populares del certamen, la cantante no esconde sus deseos de retornar al evento de la V Región, esta vez en solitario. “Para mí sería un sueño volver como solista, porque los recuerdos que tengo con La Oreja son grandes, y porque es un festival emblemático, con el que tengo un apego especial”.

Si bien hubo acercamientos, la opción de Viña 2016 se habría enfriado, aunque existen conversaciones para que la española se presente en otros festivales televisados del verano próximo. “Estamos ahí, vamos a ver qué ocurre”, cierra.