"Nosotros nos conocemos desde niños, tenemos una amistad como hermanos", así describe Reinaldo Riquelme su relación con Rodrigo Jiménez, el joven de 25 años que desapareció la madrugada del viernes en el cantón de Friburgo, Suiza.

En conversación con La Tercera.com, Riquelme, quien vive hace ocho años en el país helvético, señaló que desde su desaparición no ha dejado de buscarlo, incluso para hoy tiene organizado un grupo de búsqueda "para revisar cada centímetro, porque si realmente pasó por ahí algún indicio tiene que haber dejado".

"No sé que le puede haber pasado. Hoy no elimino ninguna posibilidad, la único que elimino es el suicidio, era una persona luchadora. El siempre me decía: 'Gracias por haberme ayudado y nunca te voy a dar ningún problema', siempre me levantaba el ánimo cuando estaba deprimido", dice emocionado. "No creo que sea xenofobia, porque Suiza es un país multicultural y hay una mezcla de raza enorme. Lo que no descarto es la violencia gratuita. Yo no me voy a quedar tranquilo hasta que sepa lo que pasó", agrega.

Riquelme cuenta que la última vez que lo vio fue el día jueves (9 de octubre). "Quedamos con que el viernes yo no podía salir porque tenía una comida con mi señora en casa de amigos, pero que el día sábado tenía que venir a la casa a tomar algo y el día domingo tenía que venir a la casa a cocinar empanadas, porque a mi señora le gustan las empanadas", cuenta.

"El día viernes salió a tomarse algo, a bailar hasta 04:30 horas, que es cuando cierran los locales. Un amigo que estaba con él le propuso pagarle un taxi, pero no aceptó y yo el día sábado lo llamé a las 09:00 horas para que fueramos a ver un partido de fútbol y me respondió el buzón de voz, a mi me pareció extraño porque lo conozco y nos comunicamos todos los días, pero pensé que era muy temprano. Luego lo llamé en la tarde y de nuevo apareció el buzón de voz y pensé que podía estar trabajando, porque a veces trabajaba el sábado. Después lo llame en la noche, pero no respondió", recuerda.

Riquelme señala que lo continuó llamando el día siguente y como no le respondía sintió "una angustia enorme", sin embargo, no quería crees que había desaparecido. "El lunes a las 08:05 horas llamé a su trabajo y me dijeron que no había llegado, que les parecía raro, porque nunca faltaba y siempre llegaba a la hora. Ahí fue cuando tomé la decisión de dar un aviso de desaparición, porque lo conozco, sé como es y una persona como él no desaparece así como así", dice.

Una vez que la policía tomó conocimiento de la desaparición de Jiménez, comenzó su búsqueda en los hospitales y posteriormente se siguió la pista con perros entrenados, que no encontraron nada. "El día miércoles fueron a buscarlo a un bosque, por donde tiene que pasar para llegar donde vive y no encontraron nada. El jueves la policía fue a su cuarto a ver si encontraban su pasaporte para poder descartar la hipótesis de que se había ido del país, pero lo encontraron. Hoy recibí un llamado de que lo buscarán en el río a partir del lunes", añade.

Riquelme destaca que la policía ha tomado todas las medidas correspondientes y que pese a que su amigo se encontraba indocumentado, no han hecho ninguna diferencia. De hecho, cuenta, que se encuentra muy conmovido por la reacción de la gente. "Estoy emocionado al ver tanta gente que no conozco se esté preocupando y quiera buscarlo", dice.

Jiménez lleva un año y tres meses en Suiza, trabajando en una empresa de transportes. "Se estaba adaptando bien, incluso ya hablaba un poco de francés, estaba muy contento", cuenta Riquelme.

Mientras su familia en Quilpué realiza gestiones en la Cancillería, para que "se tomen las gestiones que ayuden a encontrarlo". "Mi hermanno mayor fue ayer a hablar a la Cancillería para ver que gestiones se estaban haciendo, porque se quiere pedir que hagan una busqueda de aire, porque donde él está hay mucho bosque, entonces la búsqueda en tierra es muy lenta, nosotros hicimos esa sollicitud pero aún no tenemos respuesta", dice su hermana, Carolina Jiménez.

"Nosotros estamos pidiendo que el Gobierno interfiera de una forma más concreta, que nos den más explicaciones, que intercedan más, pese a que estaba indocumentado no deja de ser chileno", agrega.

Al igual que Riquelme, Carolina descarta la hipótesis de un suicidio. "El estaba super bien, estaba super contento, incluso el viernes llamó a mi mamá para decirle que le había mandado una encomienda con unas ropas, cosas, y estaba contento, porque le estaba yendo bien, estaba juntando plata, porque él quería ayudar a mi mama, su idea era poder sacar adelante a mi mamá, a mi papá, que no son personas mayores, pero no son gente de recursos", cuenta.