La activista estadounidense y defensora de los derechos humanos Marcella Sali Grace fue violada y asesinada en la sierra del estado mexicano de Oaxaca, sur de México, informaron hoy activistas de derechos humanos y fuentes oficiales.

Fuentes de la Fiscalía de Oaxaca indicaron que el cadáver de Sali Grace fue encontrado en una cabaña en la comunidad de San José del Pacífico, a unos 170 kilómetros de la ciudad de Oaxaca, capital del estado del mismo nombre.

El cadáver de la activista fue reconocido por su amiga Patricia Cruz, quien se trasladó al servicio forense de Miahuatlán, a donde fueron llevados los restos.

Según el informe del agente de la Fiscalía encargado de abrir la investigación correspondiente, la activista, de entre 30 y 40 años, fue acuchillada en el antebrazo, abdomen y espalda, lo que le provocó la muerte.

Organizaciones No Gubernamentales (ONG) del estado exigieron a las autoridades el esclarecimiento de los hechos y denunciaron que este crimen tiene relación con la represión contra los movimientos sociales en Oaxaca y los "observadores internacionales" que visitan la zona, una de las más pobres de México.

"No descartamos que los actores intelectuales sean los mismos que ordenan la represión contra el pueblo de Oaxaca, que lucha por justicia y libertad", señaló un comunicado firmado por diversas ONG.

Entre ellas están el Encuentro de Mujeres Oaxaqueñas "Compartiendo Voces de Esperanza", Colectivo Mujer Nueva, Consejo Indígena Popular de Oaxaca Ricardo Flores Magón, Colectivo Tod@s Somos Pres@s y Encuentro de Jóvenes en el Movimiento Social Oaxaqueño.

Los organismos civiles recordaron que en fechas recientes la activista denunció que "sufría de persecución política y vigilancia."

Agregaron que Sali Grace participó desde 2006 en las luchas de las organizaciones populares de Oaxaca y era solidaria con otras causas en el mundo contra el racismo.

Entre otras actividades, la occisa ofrecía "cursos de defensa personal a las mujeres" contra el acoso que sufren de los varones, para tratar de que fuesen "libres y respetadas".