Parecía que Bélgica volvía sufrir más de la cuenta, pero en el final del encuentro logró derribar su estigma y se impusó por 0-4 a Hungría. Así avanzan a cuartos de final, donde se enfrentarán a la sorpresa de la Euro: Gales.

La virtud de los pupilos de Marc Wilmots fue marcar antes del primer cuarto de hora. Toby Alderweireld aprovechó un centro pasado de Kevin De Bruyne y cabeceó solo cerca del área chica (10').

El partido fue de dominio absoluto de los belgas. Aparecieron por todos los frentes, pero no lograban cerrar el cotejo. Así el suspenso apareció en Toulouse. En más de una ocasión el empate estuvo cerca.

Pero en los últimos quince minutos del partido, Bélgica mató a su rival. El recién ingresado Michy Batshuayi anotó en su primer contacto con el balón. Marcó con el arco descubierto y derrumbó la ilusión húngara (78'). Aún no terminaban de celebrar, cuando apareció la figura y capitán: Eden Hazard encaró hacia el arco de Gabor Kiraly y remató desde afuera para decretar la clasificación belga (79'). El gol de Yannick Carrasco (90') fue solo un grito de advertencia: Bélgica peleará la Euro.