Consolas de los 90: la nueva obsesión de los coleccionistas digitales
A pesar de vivir en una época donde los videojuegos han alcanzado niveles de realismo incomparables, los fanáticos siguen llenando sus piezas de Super Nintendos, Sega Genesis y Gameboys para revivir la que por muchos es considerada la época dorada de los videojuegos.
La rutina era simple, pero dolorosa para Pablo Muñoz (26), diseñador gráfico y gamer desde que tiene uso de memoria: "Tuve todas las consolas de Nintendo a lo largo de mi historia, pero siempre para tener la más nueva tenía que vender la anterior", recuerda.
Nunca pensó que el tiempo, el dinero y una nueva moda le darían la oportunidad de recuperar sus antiguos equipos, ahora convertidos en objetos de culto, como el resto de las consolas noventeras: la nueva obsesión de los coleccionistas digitales que alguna vez estuvo dominada por el "revival" de Atari. Un fenómeno que, además, viene acompañado de un esfuerzo de las compañías para capitalizar el nuevo impulso retro.
HASTA 500 DOLARES
El encanto de la década de los 90 es innegable: fue la última generación de consolas con gráficas en 2D, los controles eran simples y sus cartuchos, hoy reemplazados por los CD, permitían jugar directamente sin necesidad de tiempos de carga. Eso motivó a Pablo, apenas consiguió trabajo, a comenzar a invertir para recuperar sus joyitas. "En cuatro años creo haber gastado unos 300 mil pesos en consolas y juegos", dice , lo cual le ha permitido tener hoy una colección de cerca de 90 juegos y nueve consolas, entre hogareñas y portátiles.
Los lugares preferidos para adquirirlas son ferias como el Persa Bío Bío, aunque internet también ha ayudado a facilitar la búsqueda. Dependiendo del estado -si tiene carátula, caja o viene simplemente el cartucho- pueden encontrarse juegos desde los 15 hasta los 100 mil pesos. "Yo pagué 14 mil por la versión japonesa de Super Mario RPG, pero por eBay he visto gente que desembolsa hasta 500 dólares por los videojuegos más escasos". Diez veces lo que cuesta un videojuego moderno.
Pese a eso, los fanáticos no son pocos. En Facebook sólo el sitio "Amamos Super Nintendo aunque sea viejo", tiene 140 mil miembros.
COLECCIONISTAS
José Antonio González (17) está recién comenzando. Aún conserva la consola que le regalaron cuando niño, pero perdió gran parte de los juegos, que hoy intenta recuperar entre los coleccionistas. "Juego una vez a la semana con mi Super Nintendo (1991)", dice José orgulloso. No más que eso, pues teme que el equipo se estropeee. "El principal problema que tienen estos juegos es una pila que con el tiempo se termina gastando. Por suerte, nada que alguien que sepa soldar no pueda reparar", dice José Pérez (23), otro coleccionista.
MEMORIA COLECTIVA
Todos coinciden en que la gracia de estas máquinas noventeras es jugar en grupo, invitando a amigos que comparten los mismos recuerdos y aprovechando que gran parte de estos clásicos son multijugador. Gracias a ello pueden revivir la etapa donde lo que importaba era vencer al oponente.
Como estos juegos definieron un estilo de jugadores que se mantiene hasta el día de hoy, títulos como Super Mario Kart, Street Fighter 2 o Mortal Kombat aún son incluidos en sus versiones originales en torneos y juntas de gamers. Así es como las mismas compañías de videojuegos se han encargado de lanzar, mediante servicios de descarga digital, los clásicos para consolas como Wii.
Y si bien hay posiciones encontradas, todos coinciden en que la experiencia sin los controles y cartuchos originales no es la misma. ¿Lo bueno? El negocio de distribución digital hace que los precios de los juegos físicos bajen. Una oportunidad para los coleccionistas.
Lo Último
Lo más leído
1.
2.
3.