Inusual fue el incidente que vivió ayer por la tarde el volante portugués Cristiano Ronaldo en momentos que firmaba autógrafos para los fanáticos del Real Madrid en Irlanda, ya que dos de sus compañeros y amigos lograron sonrojarlo entregándole una foto en la que aparecía él en un pequeño traje de baño.

Se trata del argentino Gabriel Heinze y del portugués Pepe, los dos mejores amigos de CR9 en la plantilla "merengue", le hicieron pasar unos instantes de apuros en una imagen graciosa que demuestra el buen ambiente que se respira en el vestuario blanco.

Los tres jugadores eran los últimos del plantel en retirarse hacia el hotel tras el entrenamiento de ayer por la tarde. Pepe iba más adelantado en la firma a los numerosos aficionados que acudieron a ver de cerca a los madridistas, cuando llegó a sus manos un calendario de Cristiano que ya habían firmado otros compañeros en el que aparecía ligero de ropa.

El luso, comenzó a reírse ante la foto que le hacían firmar, un calendario con Cristiano en un traje de baño diminuto saliendo de una piscina. Cuando Heinze lo vio de lejos no tardó, entre carcajadas, en tomar el calendario y comenzar a ver el resto de fotos en las que el astro portugués posaba como modelo.

Heinze incluso trató de arrancar la foto más atrevida, ante los gritos de los niños pidiendo que no lo hiciera, alertando a Ronaldo de lo que estaba ocurriendo.

Así el ex Manchester United se acercó con cara de vergüenza y sonrojado, adelantando que sería el centro de las bromas en la cena o el vestuario cuando se mostrase la imagen, pidió a Pepe que no se quedara con la imagen, y logró devolverle el calendario a los aficionados.