Señor director:

Las cifras del estudio de la Eclam que señalan un aumento significativo de prevalencia de Síndrome de Down, nos llevan a reflexionar qué respuestas estamos entregando a miles de familias que tienen un hijo con discapacidad intelectual. Los  actores sociales han ido definiendo sus roles, sin embargo, es urgente que el Estado determine políticas.

Nuestra experiencia en esta área nos ha permitido evolucionar en las intervenciones con los niños y sus familias, desde la atención temprana, siguiendo con todo el proceso educativo, bajo la convicción de que cada niño tiene un potencial que debe desarrollar recibiendo apoyo. Hoy, muchos jóvenes con discapacidad intelectual se están incorporando al mundo laboral debido, en gran parte, a que las familias han cambiado su mirada sobre la formación de sus hijos, orientándola a entregar mayor autonomía. En este ámbito hemos realizado los mayores cambios de paradigmas, centrando la intervención  en mejorar los logros personales y potenciar la autodeterminación.

Durante años hemos entregado los apoyos para lograr una máxima participación de las personas con discapacidad intelectual, pero aún queda mucho por hacer desde la sociedad para lograr la plena inclusión de este importante grupo de personas.

Carmen Artaza B.
Directora Area Técnica Coanil